¿DÓNDE ESTÁN
LOS INTELECTUALES?
José Luis Ayala.
H |
ay una oportuna pregunta que recorre las salas de
conferencias, calles, universidades, plazas y lugares donde generalmente se
reúnen los escritores, poetas, periodistas, académicos, periodistas,
narradores; en fin, los intelectuales. Pero ¿quién es un intelectual? ¿Qué
función cumple en nuestra escindida sociedad multiétnica y pluricultural? ¿Los
intelectuales peruanos están a la atura de las circunstancias históricas que
les ha tocado vivir? Se trata de personas que se dedican fundamentalmente a las
actividades o trabajos en los que predomina el uso de la cultura, la razón
dialéctica y la inteligencia.
J.C. Mariategui |
No han dicho nada y eso es grave. Es una evasión que significa
un absoluto desprecio a las grandes mayorías excluidas del sistema.
Especialmente a los niños que han quedado huérfanos por la muerte sus padres.
¿Qué será de ellos? Un hecho ineludible era discutir un proyecto educativo para
los 50 años.
Una sociedad que carece de una propuesta educativa para el
futuro, está condenada a la dependencia y vasallaje.
Entonces, las preguntas puntuales son: ¿Dónde están los
intelectuales? ¿Qué clase de libros han escrito? ¿Cuáles son sus preocupaciones
y propuestas? ¿Cuáles son los textos más importantes? Es preciso que nos
expliquen qué hemos sido, cómo somos y qué podemos ser. Si los intelectuales no
se ocupan de estos temas, ¿quiénes lo van a hacer? Las ciencias sociales, son
indispensables para conocer nuestra personalidad colectiva y diseñar lo que se
llama ahora una propuesta histórica.
Lady Rojas Benavente, editora del Libro: JOSÉ ENRIQUE RODÓ.
EL INTERNACIONALISMO AMERICANO, escribe: “Necesitamos definir el concepto del
intelectual que se gestó a fines del siglo XIX en relación al caso Dreyfus en
Francia, oficial acusado en 1894 de traición a la patria en favor de los
alemanes, puesto en prisión y deportado, lo que despertó la indignación hacia
el juicio anti-semita y la simpatía de muchos artistas entre ellos Emile Zola,
que lograron que se abriera de nuevo el caso. Mientras tanto se formó la Liga
Francesa para la defensa de los Derechos del Hombre y el ciudadano. Solamente
en 1906, la Corte de Casación reconocerá su inocencia”1 ¿Cuántos delincuentes
de cuello y corbata andan sueltos? ¿Cuántas personas que han sido condenadas a
pagar una indemnización al Estado y no han pagado ni un solo centavo?
Lady Rojas al referirse a dos intelectuales como Rodó y
González Prada, asevera que: “repararon las dificultades internas de sus
naciones y los conflictos internacionales que impidieron que el continente
americano saliera del oscurantismo político de la coloniedad
pos-independentista y del militarismo abusivo. Por eso no pasaron a otro
momento histórico de completa independencia estatal educación democrática y
modernización verdadera en todos los planos: ideológico, cultural, artístico,
económico y social. La presentación de los breves ensayos del artista José
Enrique Rodó, que hizo parte del Novecientos, generación de descollados
escritores de su país”. (Pág. 11)
Uno de los más importantes ensayistas peruanos del siglo XX
como es Edgar Montiel, aseveró que el Perú nunca tuvo generaciones de
intelectuales, porque el Estado y las universidades no se preocuparon de formar
cuadros que respondieran a los retos del curso de la historia. ¿Qué se puede
esperar ahora si se han suprimido los cursos de historia y filosofía? ¿Qué
clase de ciudadanos vamos a tener? Otra vez la pregunta llega sola: ¿hasta
cuándo los oprimidos votarán por sus opresores? ¿Hasta cuándo los más capaces
serán avasallados por las empresas o dueños de universidades chatarra?
Garcilaso de la Vega, Huamán Poma de Ayala, Blas Velera y
muchos otros cronistas nos han dado una visión del pasado del Perú. La historia
de la República ha sido escrita de modo parcial por Jorge Basadre, Raúl Porras,
José de la Riva Agüero, José Agustín de la Fuente, etc., etc. El otro lado de
la historia ha sido registrado por Tomás Caivano, Virgilio Roel Pineda, Edmundo
Guillén Guillén, Juan José Vega, Hernán Amat Olazábal, etc., etc.
¿Con cuál versión debemos quedarnos? El gran desafío que
tienen ahora los intelectuales del siglo XXI, de modo especial de los jóvenes,
es reescribir la derrotista como falsa versión historia oficial del Perú.
Eludir esa tarea sería grave, es mucho más digno señalar nuestras miserias y
grandezas y no seguir engañándonos de modo sistemático. Entonces, ha llegado el
momento de recuperar la memoria social para diseñar al mismo tiempo, un
proyecto histórico para el siglo XXI.
__________________
1.- José Enrique Rodó: El intenacionalismo
americano. Edición a cargo de Lady Rojas Benavente. Pág. 10. American S.R.L.
Buenos Aires, 2019.
2.- José Enrique Rodó: El intenacionalismo
americano. Edición a cargo de Lady Rojas Benavente. Pág. 18. American S.R.L.
Buenos Aires, 2019.
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