viernes, 22 de noviembre de 2019

COYUNTURA POLITICA PERUANA


LECTURAS INTERESANTES Nº 929
LIMA PERU           22 NOVIEMBRE 2019
DON DIONICIO
César Hildebrandt
(En modo animus jocandi)
Tomado de HILDEBRANDT EN SUS TRECE N° 469, 22NOV19

«Nosotros, que estamos con la patria siempre, que ganamos nuestra marmaja con nuestro esfuerzo y muchas veces el sacrificio de la vida, tenemos que tomar una posición sobre el asunto del colega Dionisio Romero Paoletti. La tenemos que tomar por ser de justi­cia pronunciarnos y porque hemos escuchado (y leído) tantas cosas fue­ra de tono, que no podemos seguir en silencio viendo cómo tasajean y diezman a un señor de señores.
Felizmente que la mayor parte de la prensa, que es decente, ha sido muy comedida con Don Dionisio, pero hay otros que se creen santos varones y que despotrican como si en el cielo ellos tuvieran derecho de admisión. A estos nos vamos a referir.
¿Qué se han creído estos hipó­critas? ¿Serán los llaveros de San Pedro? ¿Serán los capazotes de la virtud? No hay derecho.
Don Dionisio Romero Paoletti, como su padre, ha contribuido, con la grandeza de sus realizaciones, a que el Perú salga de perdedores. Y eso lo que produce es envidia.
Tenía razón Don Dionisio cuando puso de la suya para evitar que en el Perú los comunistas volviesen a las andadas, como lo hicieron cuando el resentido cachaco Velasco Alvarado malgobemó este país bendito.
No hay ninguna duda de que el Plan Maquiavélico de Hugo Chávez era poner aquí a un hombre de su confianza para repetir la porquería castrista que estaba haciendo en su patria. Ese hombre del encargo era Ollanta Humala, que lo único bueno que había hecho fue matar a algu­nos comunistas en el Huallaga. Pero el valiente Capitán Carlos con el tiempo se convirtió, contagiado sabe Dios por quiénes, en el Comandante Humala que el comunismo internacional venezolano estaba financiando, según lo denun­ció la valiente periodista Cecilia Valenzuela.
Ante eso, Don Dionisio tomó el toro por los cuernos, como siempre, y le dio un capital firme a la señora que en ese momento -y ahora también- representaba la salvación del país, del mis­mo modo que su padre encarnó los más altos valores de la república cuando nos gobernó en esa década prodigiosa 1990-2000.
Lo hizo Don Dionisio como ha­cen sus cosas los hombres de verdad: sin dudas ni murmuraciones y sin pedir recibos ni constancias en papel. ¡Y claro que hizo bien! Gracias a la campaña en redes que también se financió con sus fondos Pro Democracia el “comandante rojo” firmó un acta de sujeción al sistema y se comprometió a no ha­cer las barbaridades que su patrón, Hugo Chávez, venía haciendo en Venezuela. Gracias a Don Dionisio y a quienes, como él, apoyaron la causa nacional, el gobierno de Hu­mala no nos llevó al abismo y, más bien, fue apoyado por las fuerzas vivas de Capeco, la Sociedad Nacio­nal de Industrias, la Asociación de Exportadores y la propia Confiep.
Ahora vienen periodistas de las ONG y calumnistas (sí: calumnistas) de la peor tinta a tratar de ha­cerle cargamontón a Don Dionisio. Eso es algo que los peruanos de bien no podemos permitir. Don Dionisio es parte del patrimonio nacional y sus empresas son la mejor cara que el Perú puede ofrecer al exterior. Sólo el comunismo malsano y la en­vidia pueden decir lo contrario.
Escribimos esto, con la asesoría de nuestros abogados, porque que­remos dejar constancia de que hay en el Perú gente que sabe apreciar lo que hicieron personajes como Dionisio Romero Seminario y su hijo Dionisio Romero Paoletti. A ellos nuestra eterna gratitud.
Lima, 21 de noviembre de 2019.”

FIRMAS:
Luis Pardo, Emilio Willman, Carita Cipriano Moreno, Tirifilo Gerson, Gálvez Calle, Caracol Juan Berríos, Cara de Chancho Federico Perochena, Loco Gabriela Iparraguirre, La Loba Félix Grández, Bebacho Oswaldo Gonzales, Django Alexander Pérez, Gringasho (Siguen firmas)
ORGANIZACIONES:
Pitufos del Fortín, Bravos de Canevaro, Intocables Ediles, Topos de Santa Anita, Chuquis de Campoy, Urracas de Barrios Altos, Ratas de Amauta, Cuellos Blancos del Puerto, Solidaridad Nacional CEN de FP

jueves, 21 de noviembre de 2019

MAS SOBRE LA NACIÓN AIMARA

NOTAS DE ETNOGRAFÍA AYMARA*
Alfred MÉTRAUX
Introducción, notas y traducción Domenico BRANCA
Universitat Autònoma de Barcelona

El 2 de diciembre de 1953, Alfred Métraux (1902-1963) parte en avión de Lima con destino a Arequipa (A) . El 7 del mismo mes llega a Puno y, tres días después, el 10 de diciembre, a Sandia, capital de la provincia homónima ubicada en el noroeste del departamento puneño, en una zona denominada ceja de selva (B) . Desde aquí, junto con Frank Bray y Luna Aguilera, se dirigirá andando y a lomo de mula hacia Tambopata (C), uno de los cuatro distritos que componen el departamento peruano de Madre de Dios. En ese entonces, Métraux trabajaba ya desde hacía tiempo para la UNESCO y, en calidad de experto andinista, había sido contactado en 1953 por el entonces Director del Programa de Asistencia Técnica a las Poblaciones Indígenas, Enrique Sánchez de Lozada, justamente para integrar y supervisar una investigación sobre las migraciones internas de la población aymara del Altiplano peruano. A su vez, explica el mismo Métraux, la misión se inscribía en el marco de un proyecto de las Naciones Unidas en los Andes (1952- 1953). El director del mismo, el psicólogo neozelandés Ernest Beaglehole, en el reporte de investigación sugería la posibilidad de «canalizar hacia la zona oriental, todavía virgen, el exceso de aquellos que actualmente tienden a emigrar hacia las ciudades de la costa»(D) .

De hecho, a partir de los años 40, el país fue afectado por un movimiento de emigración importante hacia la costa, y hacia Lima en particular. Es por tanto en este contexto que el etnógrafo suizo visita la zona de Puno, ciudad en la que regresará el 31 de diciembre del mismo año (E) . El día siguiente, el 1 de enero de 1954, Métraux se encuentra viajando hacia el sur, como se desprende del texto traducido, más precisamente hacia Copacabana, en Bolivia, quedándose en Yunguyo, el primer día del nuevo año, cuando asumen su cargo las nuevas autoridades tradicionales, práctica todavía vigente. La breve nota etnográfica publicada por Métraux comienza justamente con la descripción de la asunción del cargo de las autoridades en Yunguyo, un argumento desarrollado por el autor también en un texto posterior publicado en Le Courrier de l'Unesco y dedicado a las diferentes maneras de celebrar el año nuevo en distintas regiones del mundo (F) . Ahora bien, esta traducción en italiano y castellano responde al deseo de vehicular un texto “menor” de un autor que, de hecho, representa un clásico de la antropología. Responde además a un interés documental para todas las/los estudiosas/os que se ocupan de antropología andina y en particular aymara. Parece en efecto oportuno hacer accesible esta contribución de Métraux en castellano, para restituirlo al contexto a partir del cual se origina, y en particular para que sea más fácilmente consultable por las y los estudiosos reunidos alrededor de la Escuela de Antropología de la Universidad Nacional del Altiplano de Puno (G) . La nota es interesante ya que constituye el ejemplo de un tipo de comunicación científica que, actualmente, casi no tiene lugar en las revistas de antropología (H) . A nivel de contenido, podría paragonarse a las páginas ordenadas de una libreta de campo, a apuntes heterogéneos recogidos entre un desplazamiento y el otro. Durante la breve estadía en el altiplano de Perú y Bolivia, Métraux asiste por casualidad a la celebración festiva durante la asunción del cargo de las nuevas autoridades, recoge material sobre la organización social y las prácticas rituales funerarias; asiste a una de las fiestas más importantes de la región – la Virgen de Copacabana – e intenta avanzar una hipótesis de trabajo sobre el “significado mágico-religioso” que subyace a ciertas prácticas cultuales; el etnógrafo concluye esta breve comunicación con la transcripción de una reclamación de “indios” bolivianos, guardada en los archivos de las Naciones Unidas de La Paz. Al traducir traté de mantener el estilo coloquial de la narración de Métraux y de precisar algunos conceptos contextuales poco claros con algunas notas, limitadas en lo posible para una lectura más sencilla del texto.
Asunción de cargos de nuevas autoridades
El arte prehispánico del antiguo Perú nos ha familiarizado con personajes en traje festivo en los cuales se encuentran colgadas frutas y hortalizas1 . Las escenas en las que aparecen individuos adornados han sido generalmente interpretadas como representación de ceremonias mágico-religiosas para traer abundancia a la comunidad. En un estudio sobre los indios Uro-Chipaya, ya había señalado la persistencia de dichas costumbres entre los indios del Altiplano de Carangas2 . En efecto, en ocasión de sus fiestas, se adornan con guirnaldas de frutas, de quesos y de panes; suben incluso a decorar el campanario de sus iglesias3 . Sin embargo, ignoraba yo que un tal uso fuese todavía muy extendido en otras regiones de la meseta. Ahora, el 1 de enero de este año (1954), en mi camino hacia Copacabana, me encontré con la aldea peruana de Yunguyo en fiesta; el mercado estaba lleno y una multitud compacta de indios, en su mayoría ebrios, pasaban entre las filas de los vendedores. De repente una procesión estalló en la plaza, al sonido de tambores y flautas; a la cabeza avanzaba un jinete, seguido a corta distancia por su mujer. Uno y otra, aturdidos por el alcohol, oscilaban peligrosamente sobre sus cabalgaduras y habrían caído sin la ayuda de sus compañeros que, de alguna manera, intentaban mantenerlos en la montura. Dieron la vuelta al mercado desapareciendo entonces en el patio de una casa ubicada al borde de la aldea. Otros jinetes, igualmente escoltados por grupos de músicos y amigos, hicieron una breve incursión en la plaza antes de desaparecer a su vez en una casa donde rei - naba una feliz animación. Estos personajes estaban cubiertos con guirnaldas colgadas al cuello o colocadas alrededor de los brazos. Algunos llevaban sombreros de masa horneada y uno de ellos incluso un chaleco de panadero4 . Estos jinetes alegres eran los nuevos mandones: hilaquatas, alcaldes y mayordomos5 que asumían el cargo ese día y que, por tanto, estaban siendo festejados por sus parientes y amigos. Los panes y las frutas que los adornaban eran homenaje de sus ahijados de bautismo o de boda y de sus “compadres”. Éstos se fueron a casa a la cabeza de una pequeña orquesta de flautistas y tamborileros. Les habían entregado los dones con todo el respecto que exige la etiqueta, recibiendo a cambio un vaso de alcohol y un poco de hojas de coca6 . La obligación contraída con los ahijados y a veces con los “compadres” de traer en ese día panes o frutas no se ajusta a la categoría de ayni. Con esta palabra, los aymaras entienden los préstamos en dinero que se hacen a un pariente o a un amigo cuando éste está obligado a organizar una gran fiesta de carácter público o familiar. El dinero se entrega según un tipo particular de ceremonial: se presenta sobre una bandeja con frutas y trocitos de papel, y estallan petardos cuando se cambia de mano. El beneficiario de este préstamo invita a su acreedor y hace registrar la cantidad recibida. La deuda contraída es rembolsada en circunstancias análogas y según los mismos ritos: generalmente, acrece de un valor de aproximadamente el 20%, que aumenta a medida que pasa el tiempo. El ayni debe distinguirse del simple prêt o préstamo que no se acompaña de ningún ceremonial. Son especialmente los prominentes, es decir, los que serán responsables de la fiesta de la iglesia del pueblo que necesitan del ayni, ya que los gastos son considerables y pocos indios pueden hacerle frente sin el apoyo de los aynis7 .
Los abortos y el tiempo
Un indio aymara del pueblo de Tiahuanaco me ha proporcionado algunas informaciones muy interesantes e inéditas con respecto a los temores que causan en los indios los abortos accidentales: los fetos (limpo) atraen el granizo y destruyen los cultivos si no se observan ciertos ritos, como prevención. Cuando una mujer ha tenido un aborto involuntario se llama a un mago (yatiri) que modela con la grasa (huntu) la imagen de un niño. Se le hacen pequeños vestidos, casas y ollas en miniatura, y estatuillas que representan bueyes y carneros; estos objetos simbolizan los bienes del feto. El asistente del yatiri (soldado) lleva estas ofrendas al Cerro Kakaxaki donde residen los achachilas8 (antepasados). El alma del feto puede infligir a sus parientes la enfermedad o la muerte al insinuarse en el cuerpo del padre, si es niña, o de la madre, si es niño. Los yatiri conocen el secreto de un medicamento que se da a los que están amenazados por el feto: éste se prepara con diferentes hierbas y con los huesos del feto molidos, y se debe tomar la mañana en ayunas.
Ritos funerarios
Ocho días después del entierro, cuando el muerto ha sido “despachado”, los “dolientes” despliegan sus vestidos y cambian de nombre por algún tiempo9 .
Ritos para combatir la sequía
Cuando la sequía amenaza los cultivos, los indios van a buscar agua en una fuente ubicada en una zona cerca de un cerro y la traen con un vaso nuevo. Preparan una mesa10 (un conjunto de ofrendas prestablecidas). Luego ponen sapos en el vaso y lo llevan a un cerro; allí, se piensa que los animales – quemados por el sol – llamarán la lluvia con su croar desesperado11 .

Ritos de magia agraria en Copacabana

Copacabana, el mayor lugar de peregrinación de Bolivia, fue probablemente en el pasado un centro religioso de los antiguos aymara. La devoción de los indios a la famosa Virgen se acompaña de ritos paganos que, de acuerdo con mis conocimientos, aun no han desaparecido. Durante mi breve estancia en este pueblo hice algunas observaciones a propósito de este tema que, posiblemente, podrán resultar útiles a otros investigadores. Al subir a la cumbre de la gran roca que domina Copacabana, y que había sido trasformada en calvario, noté que los indios habían depositado piedras en la base de todas las cruces. En la cima de la montaña, detrás de los edificios del calvario, me di cuenta de pequeñas casas, formadas por guijarros, y de jardines en miniatura parecidos a los que podrían hacer los niños. El significado mágico-religioso de estas pequeñas chozas me fue revelado por el comportamiento de los indios que habían subido al calvario: después de rezar ante la Virgen, se dirigieron a los pequeños jardines y allí, ante el sol poniente, permanecían por largo tiempo inmóviles orando en voz baja. Se dispersaron luego en los flancos de la colina y volvieron con hojas y ramitas para plantarlas en pequeños surcos que trazaban con un palo. Durante esta operación no paraban de recitar oraciones o fórmulas que no he podido recoger. Uno de aquellos indios me explicó que los jardines representaban las chacras de papa, de cebada o de maíz que tenían en su aldea natal y que esperaban de esta manera obtener una buena cosecha para el año. Estos indios no bajaron hasta haber rezado en diferentes partes de la colina y después de haber mascado coca.
Una petición de indios aymaras
En la oficina de expertos de la Asistencia técnica de las Naciones Unidas que opera en Bolivia, tuve la oportunidad de leer un documento que había sido presentado por representantes de diferentes comunidades indígenas. Su estilo y tono recuerdan de manera singular las protestas de indios de las que Huaman Poma de Ayala había sido intérprete en el siglo XVII 12 . Se manifiesta también el antagonismo en contra de los mestizos de los pueblos, y un deseo muy característico del campesino de no ser arrastrado en la crisis política, sino de vivir en paz sin saber nada de partidos e ideologías. Estas modestas reivindicaciones merecen ser conocidas en tanto documentos que ilustran la mentalidad de los indios de la meseta andina. Se trata de una petición presentada por los alcaldes mayores de los departamentos de Oruro, Potosí, Chuquisaca y La Paz. He extraído únicamente algunos pasajes significativos, respetando la ortografía original del texto.

“Pedimos livertad y justicia y respeto Educacion, desamparo, garantias, y queremos separarnos de los esclavizados de indios y de los blancos mestizos creollos de los pubelos que siguen todavia y nos odean (sic) y nos ultrajan todavia actualmente. ... Nosotros No queremos sublivaciones. No queremos Revuluciones ne guerras. No queremos atacar a los pueblos ne a vellorios. No queremos matar a nadie ne entre nosotros hermanos indios. Si no respetamos los Derechos humanos de cada cual ne mucho menos no queremos meternos a ninguna Politicas ne partidos que sera partidos no sabemos nada y somos ignorantes.. 13

Se dirigen al Servicio de Asistencia técnica como si se tratara de una persona, y el redactor de la petición continúa:

 .”..escuchadnos, oidnos nuestros pedidos y nuestra voz de los indios y hace años vuscamos libertad y nunca hallamos y nos escuchan a los pobres indios y indias, en esta tierra firmen cuando reclamamos la libertad, màs bien nos calumnian de cabecillas, de agitadores roscas Comunistas evangelios contra gobierno Kollasuyu asi con una serie de calumnias y nos indican a los polis(ias) indios Alcaldes escolares particulares y sigue todavia persiguiendonos algunos sindicatos malos que no entienden actualmente siguen arrestos carceles y amenazas de matanzas a nosotros jefes alcaldes particulares y sigue... Queremos quedar en sus manos de los expertos de los indigenas Andinos y O.I.T. memorial explicativa hacemos con nuestros manos los que sabemos poco escribir y leer de los Indios, en las escuelitas particulares, disculpe los errores. Andres Jachakollo, Alcalde mayor particular de la Altiplanicie Campesina de Aymaras y Kechua. Provincia Paria, Misque, Charcas”.
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* Publicado originalmente en francés como NOTES D’ETHNOGRAPHIE AYMARA, Journal de la Société des Américanistes, 43, 1, 1954, 225-228 [http://www.persee.fr/doc/jsa_00379174_1954- _num_43_1_2426_t1_0225_0000_3]. Los derechos de autor están a cargo de la página web PERSEE y de su editor, el Ministère de la jeunesse, de l’éducation nationale et de la recherche, Direction de l’enseignement supérieur, Sous-direction des bibliothèques et de la documentation.
A. Se agradece a Riccardo Badini, Paola Mancosu, Sebastiano Mannia, Stefano Pau y Filippo Zerilli por la revisión lingüística en italiano, y a Montserrat Clua i Fainé y a Juan Javier Rivera Andía por la versión en castellano.
B. Para una periodización de las investigaciones andinistas de Métraux, véase Claude Auroi, Métraux et les Andes, Bulletin de la Société Suisse des Américanistes, 66-67, 2002-2003, 113- 126. De este artículo existe una versión ampliada publicada en castellano: Fascinación y cansancio: Alfred Métraux en los Andes (1930-1962), Revista Andina, 38, 1, 2004, 253-279. En relación con su estadía en Sandia, Métraux ha dejado una breve nota que, en la edición original, sigue el artículo aquí traducido: Alfred Métraux, Village préhispanique de Llajta mauka, au déssus de Sandia (département de Puno), Journal de la Société des Américanistes, 43, 1, 1954, 228-230.
C. Raoul d’Harcourt, L’assistance technique des Nations-Unies aux Indiens des Andes, Journal de la Société des Américanistes, 43, 1, 1954, 230–232.
D. Alfred Métraux, Las migraciones internas de los indios aymara en el Perú contemporáneo, in Estudios antropológicos publicados en homenaje al doctor Manuel Gamio, México, Dirección General de Publicaciones, 1956, 391-308. El proyecto al que se hace referencia era el Programa Andino de las Naciones Unidas, activo desde 1953 hasta 1974. Sobre este argumento pueden consultarse entre otros Claude Auroi, op. cit., 264-272 y Chloé Maurel, Le Programme indien-andin des Nations unies (années 1950-1960), Cahiers des Amérique Latines, 67, 2011, 137-161.
E. En la época de la visita de Métraux (1953-1954), Puno tenía alrededor de 15000 habitantes. Para encuadrar el contexto, consúltese François Bourricaud, Changements à Puno. Étude de sociologie andine, Paris, Institut des Hautes Études de l’Amérique Latine, 1962 (ed. esp., Cambios en Puno. Estudios de sociología andina, Lima, Instituto de Estudios Peruanos/Institut Français d’Études Andines, trad. de Rosalía Ávalos, 2012).
F. Le Courrier de l'Unesco publicaba cada número en versión trilingüe. Además de la francesa, existía la edición castellana (El Correo de l'Unesco) y la inglesa (The Unesco Courier). Por tanto, también los artículos de Métraux publicados en esta revista aparecen –a menudo con títulos bastante diferentes– en español e inglés. Para este artículo, véase Alfred Métraux, Un 1er janvier avec les ombres des Incas, Le Courrier de l’Unesco, 12, VIII, 1955, 14–16 (ed. esp., Fiesta con las sombras de los Incas, El Correo de la Unesco, 12, VIII, 1955, 14–16; ed. ing., Living Ghosts of the Incas, The Unesco Courier, 12, VIII, 1955, 14–16). Cabe señalar que el autor dedica algunas páginas a la asunción del cargo por parte de las nuevas autoridades también en otro trabajo: Alfred Métraux, Les indiens Uro-Čipaya de Carangas, Journal de la Société des Américanistes, 27, 1, 1935, 111-128.
G. Institución en la que he podido hacer algunas estadías de investigación, entre el 2013 y el 2016. Véase mi tesis doctoral: Domenico Branca, “La nación aymara existe”. Narración, vivencia e identidad en el departamento de Puno, Perú, Bellaterra, Universitat Autònoma de Barcelona, 2016.
H. Una parte consistente de la bibliografía de Alfred Métraux está constituida por reseñas, notas y artículos breves. Para una bibliografía bastante completa, que incluye además referencias a obras traducidas por el mismo Métraux, véase Claude Tardits, Bibliographie d’Alfred Métraux, L’Homme, 4, 2, 1964, 49-62. Véase también Raúl Antelo, Apostila antropofágica, in Alfred Métraux, Antropofagia y cultura, Buenos Aires, El cuenco de plata, 2011, 53- 110.

NOTAS
1. Es probable que Métraux se refiriera en este caso a un libro fotográfico editado por Julio César Tello, Arte antiguo peruano. Album fotográfico de las principales especies arqueológicas de cerámica existente en los museos de Lima – Primera parte: Tecnología y morfología, Inca, Revista de Estudios Antropológicos del Museo de Arqueología de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, 2, 1938.
2. Entre el 1935 y el 1936 el Journal de la Société des Américanistes de París publicó en cuatro partes un extenso trabajo titulado Les indiens Uro-Čipaya de Carangas y dedicado a diferentes aspectos como la organización social, la religión, la cultura material y la lengua Uro- Čipaya. El material etnográfico había sido recogido entre diciembre de 1930 y marzo de 1931, además de otra visita en junio del mismo año. En una nota breve de 1931 – Alfred Métraux, Retour de M. A. Métraux, Journal de la Société des Américanistes, 23, 1, 1931, 265 – el autor informaba a la Societé des Américanistes – la fecha era el 22 abril – que regresaba «de la expedición en la región de los Čipaya» (como se ha visto, regresará nuevamente algunos meses después). En el mismo año, la introducción a un artículo publicado en la revista literaria argentina Sur presentó la contribución de Métraux en estos términos: «rehuyendo la excesiva especialización, este trabajo documental del Dr. Metraux [sic] constituye, sin duda, la exposición más completa y precisa que hasta la fecha haya sido consagrada a la misteriosa región de los Uros desde el tiempo de la conquista»: Alfred Métraux, Un mundo perdido. La tribu de los Chipayas de Carangas, Sur, I, 1931, 98.
3. A este respecto, véase Alfred Métraux, Un mundo perdido, op. cit., 116, 123.
4. En la edición original, Métraux señalaba unas ilustraciones a este propósito (Pl. IX, 1 e 2).
5. Se trata de términos que designaban diversos roles dentro de la organización social aymara, tanto urbana como rural. En un artículo de 1955, Métraux escribe: «Esta fecha no marca ya el comienzo del año religioso y no tiene nada que ver con la idea de las estaciones. Es importante, por el contrario, en la vida política, pues ese día es señalado para la entronización de los hilakata, de los alcaldes y de los campos, que han reemplazado a los arcaicos funcionarios del Emperador. Designado por los patrones de las haciendas o por las autoridades de las repúblicas andinas, esos “mandones” o jefes son igualmente escogidos por los indios después de interminables discusiones y arreglos de los cuales se excluye a los blancos»: Alfred Métraux, Fiestas con las sombras de los Incas, El Correo de la Unesco, VIII, 12, 1955, 14.
6. Las relaciones de compadrazgo continúan siendo un rasgo esencial en la organización social aymara, quechua y, en general, puneña; véase por ejemplo Jordi Gascón, Compadrazgo y cambio en el Altiplano peruano, Revista Española de Antropología Americana, 35, 2005, 191– 206. En contextos festivos, además, la orquesta representa – en la actualidad, junto a la agrupación musical – un elemento fundamental del paisaje sonoro que caracteriza cualquier tipo de celebración: Gerardo Fernández Juárez, Aymaras de Bolivia. Entre la tradición y el cambio cultural, Quito, Abya-Yala, 2002. La coca es un elemento simbólica, ritual y socialmente significativo en todo el Altiplano andino.
7. En un artículo de 1955 sobre Tambopata, Métraux define el ayni de esta forma: «no está demás señalar la importancia del sistema de ayuda mutua llamado “ayni” que se acostumbra entre los Indios aymaras. El “ayni” toma la forma de un auxilio pecunario cuando un miembro de la comunidad debe hacer frente a un fuerte gasto: matrimonio, funerales, fiesta del Santo, etc. También este sistema prevé una cooperación entre parientes y amigos para ejecutar alguna tarea agrícola. Gracias al apoyo que se le acuerda, según las reglas del “ayni”, el colono inexperto que llega a Tambopata puede esperar sin temor la primera cosecha. Más tarde, cumplirá con sus obligaciones hacia sus benefactores»: Alfred Métraux, “Hambre de tierras”: el drama de los Indios de los Andes. El Correo de la Unesco, VIII, 2, 1955, 8.
8. Para explicar el término “achachila”, Métraux cita en un ensayo de 1934 la siguiente defnición del arqueólogo suizo Adolph Bandelier (1840-1914): «Los aymara de las islas prestan especial atención a los “achachilas”, literalmente “abuelos”, espíritus, que moran en todos los lugares prominentes, en todos los objetos sugestivos, y que se supone ejercen una influencia constante sobre el hombre. Esta creencia en los “achachilas” no es otra cosa sino el fetichismo tan bien caracterizado por el Sr. Cushing, y de los cuales he encontrado rasgos en todas las tribus indias con las que tuve contacto. El aymara cree que cada objeto extraordinario en la naturaleza contiene un núcleo o una esencia espiritual, que desempeña un papel activo en la existencia de todo lo que lo rodea, incluyendo el hombre». Aunque la acepte, Métraux considera la defnición de Bandelier «demasiado teñida de animismo». En el breve apartado titulado Les ancêtre, Métraux escribe: «Los espíritus de los antepasados (ačačila) viven en las montañas. Ellos mantienen su forma humana, pero son invisibles. Si se descuida de hacerles ofrendas de coca y llijta, se revelan peligrosos»: Alfred Métraux, Contribution au folk-lore andin. Journal de la Société des Américanistes, 26, 1, 1934, 76, 79. La referencia a la obra de Adolph F. A. Bandelier es la siguiente: The Islands of Titicaca and Koati, New York, The Hispanic Society of America, 1910, 8, 94.
9. En el ya mencionado artículo de 1934, Contribution au folk-lore andin, op. cit., 84, nota 2, Métraux se refrió a la «excelente» contribución de Rigoberto Paredes sobre prácticas funerarias aymara en Bolivia. Paredes escribió: «La víspera del octavo día, los parientes compadres y amigos, van al río a lavar la ropa y camas del difunto. De regreso y en la noche, se reúnen a velar en la habitación en la que falleció aquél. A la media noche, salen a las afueras del pueblo, regularmente al paraje por donde corre algún riachuelo, que por este motivo suele llamarse ijmaj ahuira [ijma o jijma, “viuda”, y jawira, “río”, de acuerdo con la grafía aymara actual] o sea río de la viuda. En este sitio cambian el vestido de la viuda o viudo, la entregan al oreo del viento; azotan su cuerpo con ramas de ortiga, para que las aflicciones huyan con el castigo […]. Después los hombres se ponen los ponchos al revés y las mujeres hacen lo mismo con sus sayas»: Rigoberto Paredes, Mitos, supersticiones y supervivencias populares en Boliva, La Paz, Arno Hermanos/Libreros Editores, 1920, 257-282.
10. En este contexto tiene la acepción de un rito particular – sobre una mesa se ponen una serie de objetos que serán luego quemados – que tiene como objetivo el de llamar la lluvia.
11. James Frazer – un autor citado por Métraux en diferentes ocasiones precedentes a este escrito, así como John Rowe – relató, a propósito de remedios para atraer la lluvia, lo siguiente: “Se dice que los indios aymarás hacen pequeñas imágenes de ranas y otros animales acuáticos y los ponen en las cimas de los montes como un medio de atraer las lluvias”: James G. Frazer, La rama dorada. Magia y religión, México, Fondo de Cultura Económica, trad. de Elizabeth Campuzano y Tadeo Campuzano: 102, 1981 (ed. or., 1922, The Golden Bough, New York, Macmillan). Harry Tschopik – que, de acuerdo con Auroi, Métraux conocía, así como François Bourricaud – escribió en los años 40 algo parecido a propósito de Chucuito: “Aun cuando no existe propiamente un espíritu de la lluvia, hallu [jallu, en la grafía actual], se cree que ésta es controlada por el espíritu del cerro Atoja y que en tiempos de sequía debe llamarse a un mago para que realice el ceremonial que la atrae al altar del Padre Atoja. Este rito implica la colocación de ranas, agua y plantas acuáticas del lago Titicaca en los ojos del altar, en la creencia de que cuando el agua se evapore, el Padre Antoja tendrá piedad de las croantes ranas y enviará la lluvia”: Harry Tschopik, The Aymara. In Julian H. Steward, ed, Handbook of South American Indians. The Andean Civilizations, Vol. 2, Washington, Smithsonian Institution. Bureau of American Ethnology, 1946, 128. Una práctica parecida – que Tschopik cita en la nota a lo que se acaba de relatar – la tenían, según Rowe, los incas, quienes ataban “a estancas a llamas negras o a perros y se les dejaba gritar de hambre hasta que el dios trueno tenía piedad de la gente y enviaba la lluvia”: John H. Rowe, Inca Culture at the Time of the Spanish Conquest, In Julian H. Steward, ed, Handbook of South American Indians. The Andean Civilizations, Vol. 2, Washington, Smithsonian Institution. Bureau of American Ethnology, 1946, 183–330.
12. Felipe Guamán Poma de Ayala (1534 ca – ¿1615?) fue un cronista indígena peruano, autor de una obra central para la historiografía y las ciencias sociales americanistas, la Primer Nueva Corónica y Buen Gobierno. En su clásico Los Incas, Buenos Aires, Centro Editor de América Latina, 1975, 137 (ed. or. Les Incas, Paris, Édition du Seuil, 1962) Alfred Métraux dijo de él: «Escenas de la vida incaica fueran fielmente trazadas con una honesta ingenuidad por un indio, Felipe Huamán Poma de Ayala. Su manuscrito, descubierto a comienzos de siglo, fue reproducido en edición facsimilar por el Instituto de Etnología de París”»: Nueva chronica y buen gobierno, Codex péruvien illustré, “Travaux et mémoires”, 23, Paris, 1936. La edición de la obra estuvo a cargo de Paul Rivet, maestro y amigo de Métraux.
13. En castellano en el texto.

14. En castellano en el texto.

En pie de lucha

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MAS SOBRE CHAMBI


CHAMBI, EL MEJOR OJO
MIRKO LAUER
No parecía necesitar un reconocimiento más, pero quién sabe. Que el Ministerio de Cultura declare a la extraordinaria obra fotográfica de Martín Chambi (1891-1973) Patrimonio de la Nación es en cierto modo rizar el rizo, puesto que ya lo era. Pero no critiquemos al Estado cuando está fijando su placa en el lugar adecuado. Chambi es desde hace mucho tiempo el fotógrafo más célebre del Perú, y acaso de Sudamérica.
José Carlos Huayhuaca, un profundo conocedor de la obra, sugiere que ella ha ido evolucionando hacia lo que quizás se podría llamar un exceso de celebridad. Como dice en Hueso húmero N° 58, “Nos hallamos algo incómodos con el hecho de que ahora sea, más que un artista reconocido, una celebridad o, peor todavía, una marca, en el sentido comercial de la palabra”.
Pero eso no nos debería hacer olvidar que por el camino Chambi tuvo una participación importante en varios procesos claves de la cultura en el país. Uno fue la conversión de la fotografía utilitaria en un arte. Otro fue el lanzamiento de la imagen de Machu Picchu al nivel de ícono de excelencia. Por último está su papel en el renacimiento cultural cusqueño.
Chambi no está aislado en su peripecia, sino que representa en la fotografía peruana una sensibilidad estética andina y de época, con varios representantes. Podemos llamar a ese movimiento una etapa heroica, marcada por el esplendor del blanco y negro, hasta hoy una señal unívoca del profesionalismo fotográfico, y por un manejo seguro de los factores tecnológicos en el proceso.
Esas fotos en blanco y negro pueden ser, o al menos parecer, piezas únicas, densamente cargadas del talento de quien las tomó. El color que vino después nunca logró una parecida relación con el misterio de la develación original, todas fotos sospechosas de haber sido hechas por publicistas o turistas. Las más antiguas de Chambi las vemos hoy como elegías.
En medio de una producción voluminosa, hay numerosas fotografías emblemáticas de la obra de Chambi. En lo personal prefiero los interiores que realizó por encargo como fotógrafo de estudio, en especial “Novia en la Mansión Montes, 1929” que, como nos ilustra Huayhuaca, en realidad son dos fotografías, y una historia en medio de ellas.

martes, 19 de noviembre de 2019

LA COYUNTURA POLÍTICA EN LATINOAMÉRICA


LECTURAS INTERESANTES Nº 928
LIMA PERU           19 NOVIEMBRE 2019
BOLIVIA. 
EL ODIO AL INDIO
Álvaro García Linera.  Diario UNO 18 noviembre, 2019
C
omo una espesa niebla nocturna, el odio recorre vorazmente los barrios de las clases medias urbanas tradicionales de Bolivia. Sus ojos rebalsan de ira. No gritan, escupen; no reclaman, imponen. Sus cánticos no son de esperanza ni de hermandad, son de desprecio y discriminación contra los indios.
Se montan en sus motos, se suben a sus camionetas, se agrupan en sus fraternidades carnavaleras y universidades privadas y salen a la caza de indios alzados que se atrevieron a quitarles el poder.
En el caso de Santa Cruz organizan hordas motorizadas 4×4 con garrote en mano a escarmentar a los indios, a quienes llaman «collas», que viven en los barrios marginales y en los mercados. Cantan consignas de que «hay que matar collas”, y si en el camino se les cruza alguna mujer de pollera la golpean, amenazan y conminan a irse de su territorio. En Cochabamba organizan convoyes para imponer su supremacía racial en la zona sur, donde viven las clases menesterosas, y cargan -como si fuera un destacamento de caballería- sobre miles de mujeres campesinas indefensas que marchan pidiendo paz.
Llevan en la mano bates de béisbol, cadenas, granadas de gas; algunos exhiben armas de fuego. La mujer es su víctima preferida; agarran a una alcaldesa de una población campesina, la humillan, la arrastran por la calle, le pegan, la orinan cuando cae al suelo, le cortan el cabello, la amenazan con lincharla, y cuando se dan cuenta de que son filmadas deciden echarle pintura roja simbolizando lo que harán con su sangre.


En La Paz sospechan de sus empleadas y no hablan cuando ellas traen la comida a la mesa. En el fondo les temen, pero también las desprecian. Más tarde salen a las calles a gritar, insultan a Evo y, con él, a todos estos indios que osaron construir democracia intercultural con igualdad. Cuando son muchos, arrastran la Wiphala, la bandera indígena, la escupen, la pisan la cortan, la queman. Es una rabia visceral que se descarga sobre este símbolo de los indios al que quisieran extinguir de la tierra junto con todos los que se reconocen en él.
El odio racial es el lenguaje político de esta clase media tradicional. De nada sirven sus títulos académicos, viajes y fe porque, al final, todo se diluye ante el abolengo. En el fondo, la estirpe imaginada es más fuerte y parece adherida al lenguaje espontáneo de la piel que odia, de los gestos viscerales y de su moral corrompida.
Todo explotó el domingo 20, cuando Evo Morales ganó las elecciones con más de 10 puntos de distancia sobre el segundo, pero ya no con la inmensa ventaja de antes ni el 51% de los votos. Fue la señal que estaban esperando las fuerzas regresivas agazapadas: desde el timorato candidato opositor liberal, las fuerzas políticas ultraconservadoras, la OEA y la inefable clase media tradicional. Evo había ganado nuevamente pero ya no tenía el 60% del electorado; estaba más débil y había que ir sobre él. El perdedor no reconoció su derrota.
La OEA habló de «elecciones limpias » pero de una victoria menguada y pidió segunda vuelta, aconsejando ir en contra de la Constitución, que establece que si un candidato tiene más del 40% de los votos y más de 10% de votos sobre el segundo es el candidato electo. Y la clase media se lanzó a la cacería de los indios. En la noche del lunes 21 se quemaron 5 de los 9 órganos electorales, incluidas papeletas de sufragio. La ciudad de Santa Cruz decretó un paro cívico que articuló a los habitantes de las zonas centrales de la ciudad, ramificándose el paro a las zonas residenciales de La Paz y Cochabamba.
Y entonces se desató el terror.
Bandas paramilitares comenzaron a asediar instituciones, quemar sedes sindicales, a incendiar los domicilios de candidatos y líderes políticos del partido de gobierno. Hasta el propio domicilio privado del presidente fue saqueado; en otros lugares las familias, incluidos hijos, fueron secuestrados y amenazados de ser flagelados y quemados si su padre ministro o dirigente sindical no renunciaba a su cargo. Se había desatado una dilatada noche de cuchillos largos, y el fascismo asomaba las orejas.
Cuando las fuerzas populares movilizadas para resistir este golpe civil comenzaron a retomar el control territorial de las ciudades con la presencia de obreros, trabajadores mineros, campesinos, indígenas y pobladores urbanos -y el balance de la correlación de fuerzas se estaba inclinando hacia el lado de las fuerzas populares- vino el motín policial.
Los policías habían mostrado durante semanas una gran indolencia e ineptitud para proteger a la gente humilde cuando era golpeada y perseguida por bandas fascistoides.
Pero a partir del viernes, con el desconocimiento del mando civil, muchos de ellos mostraron una extraordinaria habilidad para agredir, detener, torturar y matar a manifestantes populares.
Claro, antes había que contener a los hijos de la clase media y, supuestamente, no tenían capacidad; sin embargo, ahora, que se trataba de reprimir a indios revoltosos, el despliegue, la prepotencia y la saña represiva fueron monumentales. Lo mismo sucedió con las Fuerzas Armadas.
Durante toda nuestra gestión de gobierno nunca permitimos que salieran a reprimir las manifestaciones civiles, ni siquiera durante el primer golpe de Estado cívico del 2008.
Y ahora, en plena convulsión y sin que nosotros les preguntáramos nada, plantearon que no tenían elementos antidisturbios, que apenas tenían 8 balas por integrante y que para que se hagan presentes en la calle de manera disuasiva se requería un decreto presidencial.
No obstante, no dudaron en pedir/imponer al presidente Evo su renuncia rompiendo el orden constitucional.
Hicieron lo posible para intentar secuestrarlo cuando se dirigía y estaba en el Chapare; y cuando se consumó el golpe salieron a las calles a disparar miles de balas, a militarizar las ciudades, asesinar a campesinos. Y todo ello sin ningún decreto presidencial.
Para proteger al indio se requería decreto. Para reprimir y matar indios sólo bastaba obedecer lo que el odio racial y clasista ordenaba. Y en sólo 5 días ya hay más de 18 muertos, 120 heridos de bala. Por supuesto, todos ellos indígenas.
La pregunta que todos debemos responder es ¿cómo es que esta clase media tradicional pudo incubar tanto odio y resentimiento hacia el pueblo, llevándola a abrazar un fascismo racializado y centrado en el indio como enemigo? ¿Cómo hizo para irradiar sus frustraciones de clase a la policía y a las FF. AA. y ser la base social de esta fascistización, de esta regresión estatal y degeneración moral? Ha sido el rechazo a la igualdad, es decir, el rechazo a los fundamentos mismos de una democracia sustancial.
Los últimos 14 años de gobierno de los movimientos sociales han tenido como principal característica el proceso de igualación social, la reducción abrupta de la extrema pobreza (de 38 al 15%), la ampliación de derechos para todos (acceso universal a la salud, a educación y a protección social), la indianización del Estado (más del 50% de los funcionarios de la administración pública tienen una identidad indígena, nueva narrativa nacional en torno al tronco indígena), la reducción de las desigualdades económicas (caída de 130 a 45 la diferencia de ingresos entre los más ricos y los más pobres); es decir, la sistemática democratización de la riqueza, del acceso a los bienes públicos, a las oportunidades y al poder estatal. La economía ha crecido de 9.000 millones de dólares a 42.000, ampliándose el mercado y el ahorro interno, lo que ha permitido a mucha gente tener su casa propia y mejorar su actividad laboral.
Pero esto dio lugar a que en una década el porcentaje de personas de la llamada “clase media», medida en ingresos, haya pasado del 35% al 60%, la mayor parte proveniente de sectores populares, indígenas. Se trata de un proceso de democratización de los bienes sociales mediante la construcción de igualdad material pero que, inevitablemente, ha llevado a una rápida devaluación de los capitales económicos, educativos y políticos poseídos por las clases medias tradicionales.
Si antes un apellido notable o el monopolio de los saberes legítimos o el conjunto de vínculos parentales propios de las clases medias tradicionales les permitía acceder a puestos en la administración pública, obtener créditos, licitaciones de obras o becas, hoy la cantidad de personas que pugnan por el mismo puesto u oportunidad no sólo se ha duplicado -reduciendo a la mitad las posibilidades de acceder a esos bienes- sino que, además, los “arribistas”, la nueva clase media de origen popular indígena, tiene un conjunto de nuevos capitales (idioma indígena, vínculos sindicales) de mayor valor y reconocimiento estatal para pugnar por los bienes públicos disponibles.
Se trata, por tanto, de un desplome de lo que era una característica de la sociedad colonial: la etnicidad como capital, es decir, del fundamento imaginado de la superioridad histórica de la clase media por sobre las clases subalternas porque aquí, en Bolivia, la clase social sólo es comprensible y se visibiliza bajo la forma de jerarquías raciales. El que los hijos de esta clase media hayan sido la fuerza de choque de la insurgencia reaccionaria es el grito violento de una nueva generación que ve cómo la herencia del apellido y la piel se desvanece ante la fuerza de la democratización de bienes.

Así, aunque enarbolen banderas de la democracia entendida como voto, en realidad se han sublevado contra la democracia entendida como igualación y distribución de riquezas. Por eso el desborde de odio, el derroche de violencia; porque la supremacía racial es algo que no se racionaliza, se vive como impulso primario del cuerpo, como tatuaje de la historia colonial en la piel. De ahí que el fascismo no sólo sea la expresión de una revolución fallida sino, paradójicamente también en sociedades postcoloniales, el éxito de una democratización material alcanzada.
Por ello no sorprende que mientras los indios recogen los cuerpos de alrededor de una veintena de muertos asesinados a bala, sus victimarios materiales y morales narran que lo han hecho para salvaguardar la democracia. Pero en realidad saben que lo que han hecho es proteger el privilegio de casta y apellido.
El odio racial solo puede destruir; no es un horizonte, no es más que una primitiva venganza de una clase histórica y moralmente decadente que demuestra que, detrás de cada mediocre liberal, se agazapa un consumado golpista. <->
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ALVARO GARCÍA LINERA, Vicepresidente del Estado Plurinacional de Bolivia. | http://www.la-epoca.com.bo


lunes, 18 de noviembre de 2019

NOTICIAS DE LA TIERRA NUESTRA


NOTIPUNO18NOV19
IMPACTO DE LA CRISIS DE CHILE Y BOLIVIA EN LAS ECONOMÍAS DE TACNA Y PUNO
Rafael Calagua EL COMERCIO 17/11/2019 .- Las pérdidas calculadas por la dirección de Comercio Exterior y Turismo de Tacna en la ciudad heróica ascienden a US$50 mil diarios. Para Puno, en tanto, las potenciales pérdidas en exportaciones controladas ascenderían a US$60 millones en promedio, estima la cámara de comercio local
Tacna y Puno tienen constante actividad comercial con los países vecinos de Chile y Bolivia a través de las respectivas fronteras. (Foto: Archivo El Comercio)
Desde el viernes 18 de octubre, las protestas generadas por un marcado descontento general no cesan en Chile; y las consecuencias de dichos acontecimientos han agravado la situación para miles de micro, pequeñas y medianas empresas chilenas. Juan Pablo Swett, presidente de la Asociación de Emprendedores de Latinoamérica, contó a BBC recientemente que ya se han perdido 70.000 puestos de trabajo desde la fecha; y 6.800 pymes reportaron robo, saqueos o incendio de sus comercios, según el Ministerio de Economía de ese país.
No obstante la situación que vive Chile a nivel local, en la ciudad heróica de Tacna, frontera que colinda con Arica, también existen diversos comerciantes que han visto sus negocios perjudicados por dicha situación.
La provincia, de hecho, tiene como principal fuente de ingresos a la actividad turística de acuerdo a la Dirección de Comercio Exterior y Turismo (Directur) de Tacna, y la campaña navideña -que suele iniciar en el mes de octubre- no está siendo exitosa por un menor número de ingresos de visitantes chilenos, consumidores asiduos de la mercancía de la localidad.
David Rendón, líder de Dircetur Tacna, confirma a El Comercio las pérdidas debido a las manifestaciones en el país vecino. “El sector comercial tacneño se siente bastante golpeado y se han calculado pérdidas de US$50.000 diarios. Esto empeoró en la semana del toque de queda (del 20 al 26 de octubre) en que fueron US$250.000 diarios”.
Corine Flores, presidenta de la Cámara de Comercio de Tacna, ahonda en este aspecto y comenta a este Diario que otras de las actividades principales de los chilenos que visitan la ciudad peruana son los servicios de salud, así como la gastronomía y el servicio de confección de prendas e imprentas. Estos servicios, agrega, suelen tener un mayor precio de acceso en el país vecino.
BOLIVIA: OTRO IMPACTO PARA PUNO
Desaguadero es uno de los sectores que ha sido bloqueado.
Como se conoce, las últimas elecciones presidenciales en Bolivia (20 de octubre), que fueron muy cuestionadas, dieron como ganador una vez más a Evo Morales. Las acusaciones de fraude fueron incrementándose con los días y tan solo en las primeras dos semanas de manifestaciones hubo US$167 millones de pérdida para el país vecino, como informó con anterioridad Luis Arce, el ministro de Economía de Bolivia.
En la tercera semana de protestas, Morales decidió convocar nuevamente a elecciones. Sin embargo, terminó dimitiendo y asilándose en México.
Esta complicada realidad que afronta el país del altiplano también perjudica la economía peruana; y en particular, a la economía de la ciudad de Puno. Según la Cámara de Comercio de esta ciudad, la provincia adyacente a Bolivia vive un panorama “desolador”. La Aduana de Bolivia decidió cerrar la frontera con el Perú en el distrito de Desaguadero-Puno, siendo los productos perecibles de exportación los que generan mayor preocupación a los comerciantes de la zona.
Sobre esta problemática, Úrsula Vargas, administradora de la Cámara de Comercio de Puno, explica a este Diario que las potenciales pérdidas en exportaciones controladas, provenientes de fierro, cemento y plástico, son de US$60 millones en promedio por mes. Esta última cifra, según indica, está sujeta a lo que pueda pasar en los próximos días.
Asimismo, Vargas agrega que el cierre del control aduanero ubicado en la ciudad boliviana de Guaqui deteriora incluso más la situación.
¿QUÉ OCURRE CON LAS EXPORTACIONES?
Según estadísticas de la Asociación de Exportadores (ADEX), hasta setiembre los principales productos exportados desde Perú hacia Bolivia fueron minerales, siendo el molibdeno y el ácido sulfúrico los de mayor presencia, por encima de alimentos como la palta y la fresa. Ello demuestra, de otro lado, que se presentan mayores ingresos por el sector minero que por el agrícola.
Los ingresos por exportaciones agrícolas son menores que los de minería.
Además, Carlos González, director del Centro de Investigación y Negocios Globales de Adex, agregó que la percepción que se tiene es que la crisis en la zona no se va a prolongar y en esa línea, el impacto para Puno tampoco lo hará. Se espera que se normalice la situación en aproximadamente 15 días, según el experto. No obstante, comenta que en el caso de Tacna, existen pocas posibilidades de reacción con fuentes de ingreso distintas al turismo.

CANDELARIA SE VIVIÓ EN LAS CALLES DE LIMA
Tania Quispe LOS ANDES 18/11/2019.- 30 conjuntos en traje de luces y autóctonos participaron en lanzamiento
Con un gran público espectador se realizó la Gran Parada Cultural en el centro histórico de la ciudad de Lima, como antesala del lanzamiento oficial de la festividad “Virgen de la Candelaria 2020”. 
La actividad inició en la alameda Chabuca Granda y continuó por los jirones  La Unión y Belén, Paseo de la República, hasta llegar al Parque de la Exposición.

En la parada participaron alrededor de treinta conjuntos de danzas, entre autóctonas y de luces de la región Puno. Los conjuntos autóctonos viajaron desde el altiplano, en tanto que los de traje de luces fueron los de las filiales de la ciudad de Lima.
Entre los grupos que participaron de esta gran actividad, destacaron: Sicuris Asociación Juvenil Puno, Conjunto de Zampoñas y Danza UNI Lima, Conjunto Unucajas Punta Jallapisi – Azángaro, Asociación Cultural Unucajas de Azángaro, Asociación Alpaqueros de Culta, Asociación Juvenil Puno 27 de Junio, y Kajelos de Pichacani-Laraqueri Puno, 
Asimismo, en trajes de luces, Tradicional Diablada Porteño, Asociación Cultural Folklórica Caporales Huáscar, Asociación Morenada Porteño, Asociación Caporales Romeos de Candelaria, Conjunto de Música y Danzas Autóctonas Q’antati Ururi, entre otros.
En las calles de la capital se observó el gran colorido de los trajes y la alegría de las personas; hoy se realizará el Lanzamiento oficial en el Gran Teatro Nacional.

EN TRES AÑOS SE CONSTRUIRÁN Y PONDRÁN EN OPERATIVIDAD LAS 10 PTAR: VIZCARRA
 LOS ANDES  15/11/2019 .- El presidente de la República, Martín Vizcarra Cornejo, arribó a la ciudad de Puno junto con la ministra de Economía y Finanzas y el ministro de Vivienda, Construcción y Saneamiento para hacer entrega y presentar el proyecto de “Sistema de Tratamiento de Aguas Residuales de la Cuenca del Lago Titicaca – PTAR Titicaca”.
“En un periodo de tres años se realizará la construcción y puesta en operatividad las 10 plantas de tratamiento de aguas residuales”, aseguró Vizcarra durante su discurso al tiempo de asegura que al próximo año dar´pan inicio a la construcción de una planta de agua potable para Puno y Juliaca.
A su turno el titular del Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento, Rodolfo Yañez señaló que “este es uno de los 52 proyectos priorizados en el Plan Nacional de Infraestructura para la Competitividad, que nos permitirá cerrar las brechas, en beneficio de cada uno de ustedes. Para eso trabajamos cada día, sin descanso”.
El consorcio adjudicatario se encargará del diseño, financiamiento, construcción, operación y mantenimiento de 6 nuevas plantas de tratamiento en las localidades de Puno, Juliaca Ilave, Ayaviri, Juli y Moho, así como la operación y mantenimiento de otras cuatro existentes en Azángaro, Yunguyo, Huancané y Lampa. El proyecto integral considera una inversión de más de 640 millones de soles.

LA CARRETERA TIQUILLACA-VILQUE-MAÑAZO
 RADIO ONDA AZUL 17NOV19.- Ante el incumplimiento de compromisos asumidos por parte de Provias Nacional, la empresa ejecutora Consorcio ALVAC -ARAMSA y la empresa supervisora Consorcio Palermo, transportistas, pobladores y autoridades de los distritos de Tiquillaca, Vilque y Mañazo realizaron un plantón en los exteriores de Provias Nacional – Oficina Zonal Puno, exigiendo el inicio de mantenimiento de las carreteras que conecta a estos tres distritos, la región Arequipa y el país de Bolivia. Por su parte, el alcalde del distrito de Mañazo, Miguel Quispe Achata, confirmó que la población exige un mejor servicio a los transportistas lo difícilmente se cumpliría por el total abandono de las carreteras, peor aún el pasado 08 de noviembre firmaron un contrato para los trabajos pertinentes, pero desde entonces a la fecha ya han transcurrido un año y no cumplieron con la aprobación el Programa de Gestión Vial, por ello, emprendieron un paro preventivo y no descartó que la medida podría radicalizarse.
Después de mucho tiempo de espera en la Oficinal Zonal Puno de Provias Nacional se aperturó una mesa de diálogo con intermediación del jefe de la Oficina Defensoríal Puno, Jacinto Ticona, en presencia de alcaldes distritales, autoridades, dirigentes y funcionarios de Provias Nacional y las empresas involucradas (ejecutora y supervisora), donde se llegó a los siguientes acuerdos:
Primero, el miércoles 13 de noviembre, los alcaldes distritales de Tiquillaca, Vilque, Mañazo, acompañado de dirigentes viajarán a la ciudad de Lima, para sostener diálogo con el titular de Provias Nacional, Carlos Lozada Contreras y el Ministro de Transportes y Comunicaciones, Edmer Trujillo Mori, para conocer la situación real y aprobación del Plan de Gestión Vial (PGV), documento que hasta el momento no se aprueba, generando el retraso de la ejecución del mejoramiento de la referida vía de comunicación. Segundo, la empresa ejecutora Corsorcio ALVAC ARAMSA, deberá agilizar los «trabajos de emergencia» para mantener periódicamente en buen estado la carretera hasta que inicie el proyecto de mantenimiento.
De otro lado, Venancia Apaza Pachacútec, alcaldesa del Distrito de Vilque, señaló que para fines del presente mes de noviembre, se tiene el compromiso de diferentes entidades como ANA, Ministerio de Cultura, entre otros, para hacer la entrega de los documentos correspondientes para que se pueda dar inicio con la construcción de la carretera Tiquillaca – Vilque – Mañazo.
“El titular del Ministerio de Transportes ha aceptado que se realice el mantenimiento de la carretera hasta que comience el proyecto, posterior a ello a fin de este mes se tendrán los resultados de los documentos de las instituciones involucradas y el 18 de diciembre llegará el director ejecutivo de Lima, juntamente con todos los profesionales que van a intervenir esta obra, para la entrega de la resolución con la que se dará inicio a la carretera.” detalló.
Finalmente, espera que se puedan cumplir estos compromisos realizados durante una reunión en la ciudad de Lima, en la que estuvieron presentes el alcalde provincial, alcaldes distritales y dirigentes.

FERIA DE WAWA KATU PARA LAS FIESTAS DE FIN DE AÑO
 RADIO ONDA AZUL 18NOV19.- Isaac Velarde Vargas, presidente de la Asociación de Artesanos, Productores y Comerciantes de Wawa Katu del Parque Pino, refirió que el pasado 26 de octubre presentaron un documento a la comuna puneña, solicitando que se realice la conformación de la comisión encargada de organizar la feria de Wawa Qhatu para fiestas de navidad y año nuevo.
“Realizamos esa solicitud con el fin de coordinar desde ahora sobre diversos aspectos de esta feria, como es el caso de la ubicación, ya que en la actualidad el Jr. Progreso en el que expendíamos nuestros productos se encuentra ocupado por comerciantes de la feria sabatina bajo resolución de alcaldía, entonces sería bueno prever para no generar problemas a última hora.” indicó.
Así mismo, detalló que hasta el momento no ha recibido respuesta alguna por parte del alcalde provincial y tampoco de parte de la Sub gerencia de actividades económicas, sin embargo, en cuanto al lugar de venta, propondrán que se realice en el Parque Pino o en la Avenida Floral.
Por otro lado, indicó que el día de ayer realizaron el empadronamiento de su asociación, el cual actualmente cuenta con 171 socios, de los cuales algunos ya fallecieron y algunos otros, realizaron el traspaso de sus puestos a sus hijos.
“El padrón que tenemos está desfasado, por lo que resulta necesario actualizarlo para presentar una lista a la municipalidad y de esa manera también podamos registrar la asociación en registros públicos, “finalizó.

VIII CONGRESO DE MUJERES CAMPESINAS DE LA REGIÓN DE PUNO
PACHAMAMA 18NOV19.- La representante de la Asociación Departamental de Mujeres Campesinas de Puno, Adelma Quispe Condori, señalo que hoy lunes, se desarrollará el VIII Congreso de mujeres campesinas de la región donde se debatirá la coyuntura política que se vive a nivel nacional e internacional y la participación de la mujer campesina en la política.
Mencionó que también se analizará la actual constitución política del Perú y su necesidad de cambio, para que beneficie a los sectores más pobres y campesinos, el tema del cambio climático, derechos de la mujer campesina entre otros temas.
Por su parte, Elizabeth Vilca, también integrante de la comisión organizadora, manifestó que durante estos dos días de congreso, se desarrollará diferentes actividades y talleres para que la mujer campesina pueda integrarse a la sociedad.
Asimismo, indico que para las elecciones congresales de 2020 varios partidos políticos les han relegado y no les dan la oportunidad de representar a la mujer campesina. Cabe mencionar que el octavo congreso se desarrollará en el local de construcción civil de la ciudad de Puno, que está ubicado en el Jr. El Puerto.

RECONOCEN A UNUCAJAS DE AZÁNGARO COMO PATRIMONIO CULTURAL DEL PERU
CORREO 18 de Noviembre del 2019.- Hoy lunes 18 de noviembre, aproximadamente a las 19:00 horas, se hará la entrega Oficial de la Resolución de Reconocimiento como Patrimonio Cultural de la Nación a la Danza “Unucajas de Azángaro”, que fue reconocida este ultimo 14 de noviembre por el Ministerio de Cultura mediante la Resolución Viceministerial Nº 210-2019.
Con este fin para esta oficialización cerca de 100 danzarines y socios de esta danza viajaron a la ciudad de Lima para presentarse y mostrar esta manifestación cultural que esta asociada a la renovación del ciclo vital social y agrícola.
En ese sentido, Flavio Mamani Hancco, alcalde de Azángaro, en entrevista con Diario Correo, detalló que esta entrega se efectuará durante la participación de la actividad oficial del Lanzamiento de la Festividad “Virgen de la Candelaria”, el cual se realizara en el Teatro nacional, donde los directivos y mi persona como alcalde recibiéremos esta resolución que fue esperada por más de 6 años.
La autoridad detalló, que esta delegación de danzarines del conjunto Unucajas participó de las actividades que se realizó ayer domingo, donde se llevó el pasacalle de danzas que dio inicio desde el parque Chabuca Granda y culminó en el Parque de la Exposición.
Además en este lugar donde existe el anfiteatro se hicieron presentes nuevamente mostrando lo magnifico que es esta danza tan ancestral, acotó.
“Nosotros como autoridades estamos acompañando para demostrar lo que señala en esta resolución que declara como Patrimonio Cultural de la Nación a los Unucajas, donde nos resalta el valor de identidad que está inscrito en la historia de lucha y resistencia cultural del pueblo de Azángaro”, agregó Flavio Mamani.
Finalmente el burgomaestre anunció que luego de esta declaratoria se luchará para que la provincia de Azángaro sea declarada como cuna del folclor puneño, en vista de que existen más de 100 danzas ancestrales dentro de toda esta jurisdicción, en distritos y poblados.

TRAS 18 AÑOS, YHONY LESCANO, DEJA EL CONGRESO Y VUELVE A DOCENCIA EN LA UNA
Por Kevin Moncada SIN FRONTERAS 18 noviembre, 2019
El ex parlamentario Yonhy Lescano, informó que no postuló nuevamente al Congreso porque tenía que ser coherente con sus decisiones, debido a que fue uno de los impulsores de la disolución del Legislativo.
“Yo no me he presentado porque tengo que ser coherente. En primer lugar porque impulsé el cierre del Parlamento. (Gino Costa y Alberto de Belaunde) no me parecen coherentes porque ellos decían “no a la reelección” y “cierre del Congreso.
Asimismo, reveló que presentó un escrito a la Universidad Nacional del Altiplano, para regresar a ser docente y también planea retomar su labor de abogado.
“Estoy retomando mis funciones en la Universidad Nacional del Altiplano y he presentado mi escrito para reincorporarme. Voy a comenzar a ejercer mi carrera de abogado, porque lo he sido toda mi vida. Estoy pensando ahora retomar las clases universitarias que es una experiencia fabulosa que me ha dado muchas satisfacciones y también mi ejercicio de abogado”, declaró Yonhy Lescano, quien estaría radicando nuevamente en la ciudad de Puno.
Lescano, fue electo congresista por 4 periodos 1 por Puno y 3 por Lima, llegando a totalizar 18 años de parlamentario. Y desde Puno, continuará con sus pretensiones de postular a la Presidencia de la República por Acción Popular.