viernes, 13 de noviembre de 2020

LA COYUNTURA POLITICA EN EL PERÚ

 

USTED NO REPRESENTA

A LA NACION

César Hildebrandt

Lima, 12 de noviembre del 2020

Señor Manuel Merino de Lama:

Es usted el presidente de la re­pública que reconocen y aplauden los políticos de la decadencia, los congresistas que aspiran a prófu­gos, los exparlamentarios que en­trevista el canal donde Milagros Leiva ejerce el viejo oficio de la anuencia. Pero la mayor parte de los peruanos no lo admite como máxima autoridad y no importa lo que le digan los aduladores que ahora lo rodean.


No se tome las cosas muy en serio, señor Merino. Usted ha nombrado primer minis­tro a un gato techero al que le quedan varias vidas, a pesar de las que perdió en el ridícu­lo, en su paso por el PPC o el alanismo saqueador y en su afán insaciable de figuración para las cazuelas. Este gato, señor Merino, no sólo odia a las llamas y a los huanacos sino que está acostumbrado a comer rato­nes de provincia, por lo que po­demos decir que seguridad del estado debiera instaurar medidas especiales en aras de su integri­dad. Lo que quiero decirle es que Antero Flores Aráoz se encargará de figurar como el presidente de la república en acción y le dejará a usted, que apenas puede leer, el papel que tiene la reina Isabel en el Reino Unido.

Ha dado usted un golpe insti­gado por lo peor de la política peruana. Ha reunido usted a la mu­gre y al miasma, al prontuario y a la requisitoria, a la ignorancia y a la avidez, y con todo ello ha hecho usted una ceremonia de investidura presidencial. Cree usted que así pasará a la historia, que será inevitable que el futuro lo nombre y que la memoria colectiva le reserve un lugar de privilegio. Qué ingenuo es usted, señor Merino. ¿Sabe usted cuántos “presidentes de la república peruana” yacen en el merecido anonimato? No son pocos. ¿Alguien recuerda a Francisco Valdivieso y Prada, elegido por el congreso en junio de 1823? ¿Alguien tiene en la cabeza a Manuel Salazar, que nos gobernó como “encargado del ejecutivo” desde septiembre de 1828 hasta junio de 1829 y que llegó a ocupar el máximo cargo, con igual intrascendencia, en otras tres ocasiones? ¿Estudian en nuestra secundaria a Antonio Gutiérrez de la Fuente, que dio un golpe de estado y mandó en el Perú de junio a septiembre de 1828 y que después fue presidente furtivo en otras dos ocasiones? Claro que no.

Eso es lo que le espera, señor Merino. No será usted, con los años, ni siquiera un pie de pági­na, una aclaración en bastardi­lla. ¿Cree que soy mezquino? A ver, ¿quién rinde hoy homenaje a los señores Juan Ángel Bujanda, Juan José Salas y Juan Bautista de Lavalle, fugaces mandatarios que reemplazaron al autonombrado presidente Felipe Santiago Salaverry? ¿Dónde están los monumentos y los libros dedicados a Manuel Menéndez Gorozabel, que gobernó el Perú entre noviembre de 1841 y agosto de 1842? ¿Y dón­de está la bibliografía abundante en torno a personajes como José Miguel Medina, Juan Manuel del Mar o Manuel Costas Arce, todos primeros mandatarios conde­nados al olvido? Para no hablar de los levísimos Ricardo Elías Arias y Gustavo Jiménez, pre­sidentes del Perú del 1 al 11 de marzo de 1931.

Eso le espera a usted, señor Merino: la fosa común de las torpes ambiciones, del oro­pel en traje de grandeza, de la chanfaina que quiere ser ban­quete. ¿Quería usted pasar a la historia? Pues hubiera podido in­tentarlo cumpliendo su tarea de presidente del congreso, que eso ya era bastante para sus aptitu­des.

Pero el hambre de notoriedad pudo más. Fue usted convenci­do por una gavilla de que era el hombre que podía entrar por la ventana a las celebraciones del bicentenario y aceptó el encargo. Para eso hubo de aliarse con Ac­ción Popular y con Alianza para el Progreso, con el antaurismo armagedónico y con la corte de inminentes requisitoriados que pueblan el congreso.

En cierto sentido, nos ha hecho un favor. Ya nadie podrá dudar de la podre que ha empezado a cundir en ese organismo que una vez fundó Fernando Belaunde y que tuvo como doctrina el Perú, lo que jamás significó algo que no asustara. ¿El Perú como doctrina? ¿Cuál Perú? ¿El de la página once, el de Guvarte, el de aquel primer ministro que todo lo per­mitía con tal de que la farra espol­voreada continuara? Ya sabemos qué es Alianza para el Progreso: una firma fundada por un bufón que por lo general anuncia lo que habrá de incumplir y que ha he­cho una megafortuna fabricando diplomas que no valen ni el car­tón en que están impresos. Con esos se ha aliado usted, señor Me­rino, para fingir que es presidente y para presidir por un semestre el país que hoy lo repudia. Con esos se ha aliado y, además, con Podemos, salida del patíbulo y que congrega a la mejor carne de pre­sidio del congreso. Y a toda esa federación de gentuza sume usted al fujimorismo siempre atento y al supurado aprismo que dejó el que huyó de la justicia pegándo­se un tiro salvador. Ponga usted todos esos ingredientes en una licuadora, licúe, vierta el conteni­do en un envase y entrégueselo a la baja policía. O brinde, si, como parece, quiere usted brindar.

Para deshacerse de un presi­dente salpicado por la corrupción, se ha aliado usted a los corruptos. Es usted ahora socio intrínseco de Pepe Luna y Édgar Alarcón, a quienes esperan un pecto numé­rico y una ventana de barras. Es usted socio univitelino de Ántero Flores Aráoz, que es la nada que habla, el fantasma que pena des­de aquella imaginaria república aristocrática.

¿Qué principios invoca su gobierno usurpador, señor Merino? ¿El de la restauración de la dignidad? ¿Y qué hace usted entonces con Omar Chehade y Juan Sheput?

Vizcarra de­bía responder a la justicia cuando terminara su mandato. No tenía escapatoria. Pero a usted le pudo la codicia y nos ha puesto en esta situación, una en la que a la catástrofe de la pandemia se suma hoy la flamante ineptitud de su oscuro gabinete.

Buscando la historia y sus Olimpos ha hallado usted la man­ga, señor Merino, el cómic, la ca­ricatura. Que Vizcarra fuese un investigado altamente sos­pechoso de ser culpable no le daba a usted el derecho de em­plear un artícu­lo inaplicable de la constitución para crear esta zozobra. Esta­mos en pandemia, la crisis conti­núa, la OEA no nos reconoce y del extranjero llegan señales omino­sas sobre lo que puede ocurrirle a nuestra economía en esta nueva fase de tumultos, represión e incertidumbre.

Tiene usted a un congreso que lo profirió, se ha abalanzado so­bre el ejecutivo, tiene el propósito -ya lo insinuó el gato marrullero que tiene al costado- de nombrar a un Tribunal Constitucional ad hoc y cuenta con la fidelidad de las fuerzas armadas. ¿Hasta dónde quiere llegar? ¿También quie­re la calle? ¿Por eso ha dado usted la orden de reprimir a cualquier costo las manifestaciones donde la gente repudia su interinato?

No representa usted a la na­ción, señor Merino. Representa a un congreso que se ha ilegitimado y ha tomado el palacio donde le cortaron el gaznate a Pancho Pizarro. Piénselo. ▒▒

jueves, 12 de noviembre de 2020

POBRE PERU: GOLPE DE ESTADO CONGRESAL

 


¿CÓMO HEMOS LLEGADO DE LA VACANCIA AL

GOLPE DE ESTADO?

Por: Nicanor Domínguez Faura

NOTICIAS SER.PE, 11NOV20

En un reciente artículo, de hace apenas 10 días, el sociólogo Francisco Durand explicaba que la “República Empresarial”, el proyecto político y económico neoliberal peruano iniciado por el fujimorismo en 1990-1992 --tras el colapso hiperinflacionario heredado del primer gobierno de Alan García (1985-1990)--, estaba llegando a su fin.  La principal característica de esta forma de controlar las riquezas del país ha sido la de un Estado pro-empresarial, auto-justificado mediante la ideología neoliberal y su corolario propagandístico cotidiano, el “emprendedurismo”.  Durand señalaba con claridad a sus promotores y beneficiarios: “una alianza externa (EUA, OECD, BM y FMI) e interna (grupos de poder económico y multinacionales, CONFIEP, las derechas)”.

Esta “República Empresarial” peruana ha funcionado tanto bajo la dictadura Fuji-motesinista (1992-2000), como bajo los gobiernos electos de Toledo (2001-2006), García (2006-2011), Humala (2011-2016) y Kuczynski (2016-2018).  Hasta el estallido de las investigaciones vinculadas a Odebrecht y al caso Lava Jato del último lustro, los empresarios peruanos y las transnacionales mineras y de la construcción, han dominado e impuesto sus condiciones al auto-debilitado Estado peruano (limitado por la Constitución fujimorista de 1993).  Durand indica que: “Los grandes empresarios contaron también con un notable control mediático, destacando la asfixiante influencia conservadora del grupo El Comercio (Miró Quesada) y el grupo RPP (herederos de Manuel Delgado Parker).  Incluso financiaron dos plataformas digitales (El Montonero, Lampadia) con cierto éxito”.

Esta hegemonía neoliberal en el Perú empezó a resquebrajarse al concluir el mega-ciclo exportador de minerales (2014) e iniciarse en nuestro país las investigaciones del caso Lava Jato (2016).  La volatilidad política peruana hizo imposible una candidatura unificada de las distintas fuerzas políticas que proclamaban defender las bondades del “modelo” económico neoliberal.  En la primera vuelta de las elecciones presidenciales del 10 de abril de 2016, de 10 agrupaciones políticas en competencia, la candidata de izquierda, Verónika Mendoza, obtuvo el 18.7% de la votación, quedando en tercer lugar.  Pasaron a disputar la presidencia en segunda vuelta los candidatos Kuczynski (con 21%) y Keiko Fujimori (con 39.8%).  Ante la preocupación nacional de una vuelta del corrupto fujimorismo de los 90, Kuczynski resultó vencedor por una diferencia mínima (41,057 votos, el 0.24% de los 17’152,817 votos válidos).

Plaza San Martin, Gran Marcha 12 noviembre 2020

El revanchismo de la candidata Keiko Sofía Fujimori Higuchi en contra de Kuczynski llevó a dos intentos de vacarlo por “incapacidad moral”, el segundo de los cuales tuvo éxito, debido a su renuncia del 23 de marzo de 2018.  Keiko Fujimori, en serios problemas legales por las irregularidades de sus cuentas de campaña, fue puesta en prisión preventiva por 36 meses a partir de octubre del 2018 (sin embargo, fue liberada en diciembre 2019, nuevamente recluida entre enero y abril del 2020, y actualmente, desde el 5 de mayo, se encuentra en libertad bajo fianza).  Su padre, Alberto Kenya Fujimori Fujimori, truculentamente indultado por Kuczynski el 24 de diciembre de 2017, vio su “indulto humanitario” anulado por el Poder Judicial el 3 de octubre de 2018, volviendo a prisión el 23 de enero de 2019.

El mismo obstruccionismo en el Legislativo del fujimorismo y del Apra (aliados en defensa del “modelo” neoliberal y de la impunidad de sus líderes), que manipuló los resultados del referéndum del 9 de diciembre de 2018, y rechazó la propuesta de adelanto de elecciones hecha el 28 de julio de 2019, llevaron a que el presidente Vizcarra terminara cerrando el Congreso el 30 de setiembre de 2019 (considerando que el 15 de setiembre de 2017 se le había negado la confianza al Premier Fernando Zavala en relación a las reformas educativas del gobierno de Kuczynski, que continuaba las del gobierno previo de Humala, y que ese mismo día 30 de setiembre el Premier Salvador del Solar había hecho cuestión de confianza sobre el proceso de selección de los nuevos miembros del Tribunal Constitucional, siendo ignorado por el Congreso, que solo votó sobre el tema después de que Vizcarra anunció su clausura).

El nuevo Congreso, elegido el 26 de enero de este año, entró en funciones el 16 de marzo, eligiendo como Presidente al congresista de Acción Popular por Tumbes, Manuel Merino de Lama.  Un día antes, el 15 de marzo, el gobierno había decretado el estado de emergencia y el aislamiento social obligatorio debido a la pandemia del Covid-19 en el país.  Las pésimas condiciones del sistema de salud pública de nuestro país (fruto de 30 años de políticas privatizadoras), sumadas a los errores cometidos por el gobierno al implementar medidas que parecían las adecuadas sobre el papel, pero que no tomaban en cuenta la realidad de una sociedad diversa y compleja como la peruana, han hecho que el gobierno de Vizcarra sea duramente criticado por su ineficiencia en la gestión de la crisis sanitaria.

En este contexto el nuevo Congreso, sabiéndose exceptuado por la Constitución de una nueva clausura durante el último año de gobierno, ha continuado su enfrentamiento con el Ejecutivo, rechazando las mínimas reformas propuestas (que cuentan con mayoritario apoyo ciudadano) y protegiendo diversos intereses particulares (de políticos y empresarios investigados por la Fiscalía, vinculados a diversos casos de corrupción).  En una nota reciente, el periodista Enrique Patriau identifica intereses de dueños de universidades privadas “bamba” que no han pasado el proceso de certificación de la SUNEDU, así como del reo Antauro Humala, líder etnocacerista que parece controlar a la bancada del “vientre de alquiler” llamado UPP, buscando su indulto y potencial candidatura presidencial.

Tratando de “oxigenar” su administración, Vizcarra decidió cambiar al Premier Vicente Zevallos, en el cargo por casi 10 meses desde la clausura del Congreso, y convocó a Pedro Cateriano, político de la más rancia derecha pro-empresarial, quien juramentó como Primer Ministro el 15 de julio, pero fue rechazado por el Congreso el 6 de agosto.  Fue reemplazado ese mismo día por el General de división en retiro, y hasta ese momento Ministro de Defensa, Walter Martos.

Así las cosas, el Congreso intentó una fracasada primera vacancia de Vizcarra entre el 11 y el 18 de setiembre, en base a las confusas y escandalosas acusaciones relacionadas al “caso Richard Swing” en el Ministerio de Cultura.  La revelación de coordinaciones de Merino de Lama con las Fuerzas Armadas, y las intermediaciones oficiosas de varios allegados para ir formando un futuro gabinete de ministros, terminaron de desprestigiar este torpe primer intento.  Pero un mes después, el 20 de octubre, con mejor preparación de los congresistas opositores, y utilizando los dichos de un par de “colaboradores eficaces” (es decir, empresarios corruptos que coimeaban a funcionarios para obtener contratos públicos de construcción, y que “colaborando” esperan reducir las condenas a las que están más que seguro destinados), han acusado a Vizcarra de corrupción durante su gestión como Presidente Regional de Moquegua (2011-2014).

En esta segunda campaña, como claramente señala Francisco Durand, los beneficiarios de la moribunda “República Empresarial” están profundamente comprometidos, comenzado por el llamado “Club de la Construcción”, la empresas peruanas encabezadas por Graña y Montero, coludidas con los funcionarios públicos nacionales y regionales para repartirse los proyectos de carreteras y hospitales, como acusan ahora a Vizcarra de haberles otorgado en Moquegua.  Como señala Durand: “A este esfuerzo se sumó desembozadamente el grupo El Comercio, partícipe mediático principal de esta última conjura.  En el grupo periodístico predomina ahora la ultraderecha y se mantiene esa vieja arrogancia aristocrática de sentirse con derecho a todo.  Uno de sus principales accionistas, el constructor José Graña Miró Quesada, tiene investigaciones pendientes y puede terminar en la cárcel.  Al otrora poderoso, intocable y encubierto Club de la Construcción le conviene dilatar, descarrilar las investigaciones”.

Como en el caso del intento de vacancia apro-fujimorista contra Kuczynski en diciembre de 2017 --que desde este espacio en ‘Noticias SER’ criticamos sin ambigüedades--, estos usos arbitrarios de una figura constitucional imprecisa son un abuso del Poder Legislativo en contra de un Ejecutivo débil y sin mayoría parlamentaria.  No siguen las normas legales que deben aplicarse a los funcionarios públicos que cometen delitos durante su función.  El procedimiento contra Kuczynski y Vizcarra debió iniciarse al terminar los mandatos para los que fueron elegidos.  Usar la vaga noción de “incapacidad moral” como arma para expulsar del poder al presidente de turno es una leguleyada que pretende esconder lo evidente: un golpe de Estado desde el Congreso, en defensa de intereses corruptos de toda clase.

¡Los peruanos y peruanas no debemos permitirlo!

 

Referencias:

Francisco Durand, “Se acaba la República Empresarial”, ‘OtraMirada’, lunes 2 de noviembre de 2020. < http://www.otramirada.pe/se-acaba-la-república-empresarial >

Enrique Patriau, “Intereses personales impulsaron la vacancia de Martín Vizcarra”, ‘La República’, Lima, miércoles 11 de noviembre de 2020.

https://larepublica.pe/politica/2020/11/11/intereses-personales-impulsaron-la-vacancia-de-martin-vizcarra/ >

Nicanor Domínguez Faura, “¿Cuándo les ha importado el bien del Perú?”, Noticias SER, jueves 21 de diciembre de 2017.

INTELECTUALES PUNEÑOS

 LEONIDAS CUENTAS GAMARRA

EN EL CENTENARIO DEL NACIMIENTO

Por Los Andes, 17/10/2020

Leónidas Cuentas Gamarra (Huancané, 1920 – Arequipa, 2004). Fue abogado, pedagogo, antropólogo, músico, periodista, político y militante progresista. Se desempeñó como magistrado, funcionario de la Corporación de Puno, Prefecto del departamento de Puno, alcalde de Huancané, profesor del Colegio Nacional de Varones de Huancané, Catedrático de la Universidad Nacional Técnica del Altiplano (UNTA), Juez de Primera Instancia y Juez Instructor en la Provincia de Huancané, jefe del departamento de Integración Cultural de la Corporación de Fomento y Desarrollo de Puno.

Fue autor de 14 obras de investigación antropológica social, folclore, religiosidad y literario, que tuvo la valoración de destacadas personalidades, según consta en su archivo personal. Tiene algunas obras inéditas aún; tales como, Pueblo sin nombre: Narrativa de costumbres, hechos y celebraciones, Versos libres y prosa poética, entre otros. 

Sus obras más importantes son: Apuntes Antropológicos Sociales de las Zonas Aymaras del departamento de Puno (1966), Festividad de la Santísima Cruz de Huancané, Estudio sobre el Centro Arqueológico de Taraco, Danzas del Altiplano de Puno (1981), Huancané: Enfoque Antropológico Social y Económico (1971), que ha merecido una distinción honorífica de la Sociedad Geográfica de Lima. 

También ha publicado La Fiesta de la Santísima Virgen de la Candelaria de Puno: Investigación de Folklore y Turismo, El delito de abandono de familia, Breve vocabulario Castellano-Aymara, Brujería, hechicería y curanderismo, Morbilidad, malnutrición y medicina en los Andes, textos que han merecido comentarios en la prensa especializada de la región y en el país.

Fue parte de la Federación de Periodistas del Perú, inscrito como miembro en 1969 en el Centro Federado de Puno. Publicó innumerables artículos sobre diferentes tópicos de interés general en la revista Caretas, Quilsen, La Prensa, El Comercio de Lima, El Correo de Arequipa y algunas de sus obras figuran en el “Libro de Oro” del departamento de Puno. 

Leonidas Cuentas Gamarra estudió en la Universidad Nacional de San Antonio Abad del Cusco, Facultad de Letras y Ciencias Humanas, Pedagogía Superior (Promoción, 1941), Facultad de Antropología (Promoción, 1967), así como también en la Universidad Nacional San Agustín de Arequipa, Facultad de Derecho, optando el título de abogado en 1946 e hizo sus estudios de doctorado en 1947.

Músico autodidacta. Tocaba la mandolina desde niño, instrumentos afines y el acordeón piano. Fue director del Centro Musical Huancané, que ganaron el primer puesto y el trofeo “Zampoña de Oro” en el Primer Concurso Departamental de Estudiantinas de Puno en 1957, interpretado las piezas musicales como “Kallamachu”, “Ramis”, “Calahuyo”, “Cerrito Qalak’umo” y “Cojateñita”. Los años que trabajó en Puno, perteneció al Orquestal Puno como mandolinista, dirigido por el reconocido músico puneño Castor Vera Solano. 

Sobre su Monografía de Huancané el célebre periodista puneño Samuel Frisancho Pineda dijo: “En la galana pluma de Leonidas Cuentas, el panorama físico y humano de este pueblo adquiere vida, color, movimiento, alegría y vigor. Leonidas Cuentas nos pinta un pueblo que viene desde el fondo lejano de los tiempos en continua lucha por la supervivencia y que, hoy se hace presente, renovado, vigoroso y capaz. Y es que Leonidas Cuentas nos habla con el alma del huancaneño puro e íntegro. Escribe con el pulso fuerte y sapiente heredado de amautas y guerreros wancas, y con la emoción delicada de bellas tawaqos aymaras. En las interlineas de sus obras se siente el palpitar del hombre que ama su tierra y, aún creo se esbozan lágrimas de ternura en sus ojos cuando ofrece sus párrafos más emotivos a la tierra que lo amamantó”.

Pero no cabe duda, que este año se conmemora el Centenario del Nacimiento de Leónidas Cuentas Gamarra, historiador, abogado, pedagogo, antropólogo, músico, periodista, político y militante progresista, la Municipalidad Provincial de Huancané es la entidad llamada para publicar sus obras inéditas, ese sería, sin duda alguna, el mejor homenaje póstumo.

COSTUMBRES Y MITOS POPULARS EN EL MUNDO AIMARA

 EL "KHARISIRI",

Autor anónimo, publicado en PUNO CAPITAL DEL FOLKLORE PERUANO

E

l Kharisiri es un personaje mítico oriundo de la región andina Aymara, específicamente desde Puno hasta la zona norte de Potosí (Bolivia). Se le conoce con los nombres de “Karisiri”, “Kharisiri” ó “Liqichiri”, cuya traducción del quechua al castellano nos daría “el chupador de grasa”. En otras zonas se le denomina Phistaco, Ñaqaq, ó Khari Khari.

Los indígenas de esa zona lo describen de la siguiente manera: es un ser antropomórfico de pelo amarillo, gigante, cruel y exclusivamente nocturno. Al encontrarse con él, cualquier persona empieza a sentirse como hipnotizada y mareada, lo que en el espanto aprovecha y extirpa toda la grasa del ser humano dejándolo en un estado de agonía total.

Se afirma que antes de la conquista española, el Kharisiri era un ser maléfico invisible, causante por lo general de las enfermedades consuntivas, aprovechando del sueño de sus víctimas, a las que con un pequeño corte, como queda dicho, les extraía la grasa. Después de la conquista, impresionados los andinos con ver degollar a los ajusticiados, y reducir el cadáver a cuartos, creían que el verdugo era un ser extraordinario, un malvado, representación del Kharisiri, que terminaba su sangrienta faena, andaba en las noches vestido con el hábito despojado al difunto y aún lleno de tierra y sangre, cubierta la cabeza de un capuchón, que sólo dejaba al descubierto su rostro pálido como la muerte y sombrío como la noche.

El Kharisiri llevaba en la mano una campanilla, cuyo lúgubre sonido se escuchaba de rato en rato. Decían de él que se alimentaba de carne humana, prefiriendo devorar la de los niños que encontraba a su paso. Poco a poco y a medida que las ejecuciones en esa forma disminuyeron, la imaginación de los andinos fue confundiendo al verdugo con el fraile que acompañaba al condenado a la pena de muerte, hasta que el primero desapareció de su memoria y sólo el último quedó con el mote de Kharisiri.

Con el transcurrir de los años, probablemente la circunstancia de ver trajinar con alguna frecuencia solos a los frailes y por caminos silenciosos y desiertos, haya dado también lugar a la formación de esta leyenda con todos sus lúgubres contornos. Cuando el andino no ha visto ni se ha encontrado con este personaje de lúgubre fama y siente, sin embargo, dolor al vientre y se presenta en la parte exterior la terrible mancha roja, se cree que el vampiro se hizo invisible para mejor y más cómodamente extraerle la grasa, y el infeliz dominado por tal idea desconfía de los remedios, para luego encontrar la muerte.

En la época de la colonia, el fraile simbolizó para el andino, el autor de la carestía y hambre en el sector rural, porque se supone que en las grandes alforjas se lleva consigo, con el poder de la nigromancia que profesa, y recoge cuantos víveres encuentra, dejando al pobre andino que por falta de ellos, muera por inanición con la barriga pegada al espinazo. En todas las minas de la región andina se consideró de mal agüero la presencia de un fraile; cuando uno o más de éstos se presentaban en el lugar, los mineros se turbaban, les invadía la pesadumbre, e inquietos y tristes, esperaban que de un momento a otro les sobreviniera alguna desgracia personal o algún accidente en la mina; temían que se perdiera la veta del metal que explotaban o se derrumbara y matase obreros o murieran de manera violenta uno o más de ellos.

En la década de 1930 en las minas que se explotaban en la región andina del departamento de Puno, los mineros se oponían a que se llevara a cabo un acto religioso, alegando que la presencia de un sacerdote les traía la mala suerte; porque los genios subterráneos, habitantes de las profundidades de los cerros, dueños y señores de las vetas, las ocultarían indignados por la profanación de que eran objeto, para que jamás las encontrasen y a ellos les castigaría dándoles enfermedades.

Cierta o no, la leyenda del Kharisiri sigue vigente en esa zona. Es tal el miedo a este ser que los campesinos, en algunas comunidades altoandinas, no admiten en sus comunidades el ingreso de personas con la cabellera rubia.

ASPECTO DEL KHARISIRI:

•Unos dicen que suele ser o solía ser invisible.
•Otros que es un hombre común y corriente que anda en busca de sus víctimas.
•Algunos comentan que es un cura que va en nombre de Dios aprovechándose de las personas.
•También se dice que anda con una capucha en la cabeza que solo dejaba ver su cara pálida, todo cubierto de tierra como si hubiese salido de alguna tumba, tipo acolito.
•En el campo lo más común es verlo convertido en perro, gallina, burro, oveja, etc.
En el caso del cura no solo suele ser en lugares desiertos, sino también en su misma capilla, claro que en este caso ya sería un cura maléfico y no uno normal de los que se conoce.


¿QUÉ ES LO QUE HACE EL KHARISIRI?

Tomemos en cuenta que toda esta información es recaudada de mi propia experiencia, (no sé si me exprese bien) pero lo que quiero decir es que son historias que me contaban mis parientes, amigos, el barrio, noticias, etc. No vaya ser que malinterpreten y se piensen que yo soy uno de ellos.

Bueno, el objetivo principal del Kharisiri es sacar la grasa corporal de las personas según dicen, no sé si hará más, pero simplemente sé que estos lo que hacen es quitarte la grasa de tu cuerpo y eso lo usan en sus fines que luego explicare. No vaya ser estés con unos cuantos kilitos demás y te esperes a que el Kharisiri se te aparezca y te ahorre la liposucción, todos sabemos que en el cuerpo humano tenemos dos tipos de grasas, (¿o más?) bueno no sé, la cosa es que hay grasas beneficiosas y grasas malas, y el kharisiri lo que hace es quitarte la grasa buena y no la mala, y como esta grasa es imprescindible para el cuerpo humano, dicen que mueres al instante, aunque otros dicen que puedes durar unos cuantos días.

¿QUE HACE CON LA GRASA?

Se dice que este lleva una especie de cajita de fósforo (en algunos países llamado cerillas), y que cuando este está en justo en su víctima, abre la cajita y sale una especie de mosquita que te pica, o bien un humo pequeño que hace que te desmayes al instante. También dicen que este sopla un viento que hace que tú al respirar te duermas sin darte cuenta. Otros dicen que te hace directamente un corte donde solo ellos saben para que no sientas dolor y te duermas al instante. Hay varias versiones sobre el Kharisiri.
Luego cuando ya te tiene dormido, este solía quitarte la grasa y así dejarte en la nada, aunque también se dice que este solía comer la carne humana, que prefería más a los niños.
Como ya había dicho que esta grasa es vital para el cuerpo humano, se dice que este en caso de ser una persona normal, lo vendía al extranjero por un buen precio, médicos y hospitales daban un buen pago por esta sustancia, en caso de que fuese una especie de espíritu invisible, imagino que esta grasa era su fuente de alimentación o existencia, o en caso de que fuese un monstruo o muerto viviente, este no quitaba la grasa sino que se comía la carne de sus víctimas.

"EL KHARISIRI Y LOS PERROS"

En una cabaña de Jacantaya vivía una mujer solitaria con sus dos enormes perros que tenían el nombre de Tomai Kharisa y Huaihuai Kharisa, nadie se le acercaba por temor al ataque de sus perros que acostumbraban alejar a los intrusos hasta quitarles la vida.

Cierta noche, cuando el cielo y la tierra se encuentran para producir la oscuridad total se presentó el Kharisiri (hombre misterioso degollador que saca el sebo de las personas), los perros se habían alejado del lugar y la mujer estaba indefensa, y al verse sola a merced del endemoniado personaje le dijo: ya sé que voy a morir, pero antes quisiera despedirme de esta vida bailando y cantando una canción de mi pueblo.

El kharisiri al verla tan hermosa no la hizo dormir como lo hacía con sus víctimas, aceptó la petición como el último deseo para degollarla. Entonces la mujer empezó a bailar cantando a gritos: ¡Huaihuai Kharisa! ¡Tomai Kharisaaaaaá, Tomai Kharisa! Huaihuai Kharisaaaaaá!...

Los perros al escuchar la voz de su ama acudieron velozmente, y viendo al extraño se lanzaron sobre él, quien a duras penas logró huir del lugar aprovechando la oscuridad. Huaihuai Kharisa y Tomai Kharisa emprendieron la persecución hasta acabar con el kharisiri.

Cuentan que el kharisiri no murió del feroz ataque de los dos perros, para salvarse se habría convertido en piedra o icho, por eso los perros olfatean las piedras y los ichos marcándolos con su orina.

ANÉCDOTAS PERSONALES RECOPILADAS:

*El kharisiri es una persona que a hecho un pacto con el diablo para poder adoptar cualquier forma, si crees en la existencia de satanás, debes creer en esto.

*Los kharisiris en verdad si existen, son reales, si alguna vez fue un mito o leyenda, eso quiere decir que siempre existió, y está vigente en nuestra época actual, ahora ya está en las ciudades, y no solo sacan o roban grasa del cuerpo también sacan sangre, de los pulmones, de las nalgas y del abdomen, son personas normales, pueden estar en la combi, en la plaza, en un viaje, etc.

Lo más común que nos imaginamos, es verlos convertidos en cualquier forma de animal: gato o perro, siempre hipnotizan a sus víctimas y luego aprovechan en plena luz, en segundos extraen, les escribo porque soy testigo fiel de un familia cercana, los síntomas son: dolor de cabeza, sudor intenso, todo el cuerpo se pone helado, vómitos, sin ganas de comer, calor por las noches, los pies inmovilizados, y sobre todo físicamente aparece alguna enfermedad visible, ya sea tuberculosis, agua en los pulmones, entre otros, hay que ir a un curandero sin que la persona se entere de su malestar, y lo ven por medio de la hora, y la coca, darle de beber lo que el curandero tiene preparado en líquido, y si es posible, echarle el sebo de oveja negra donde el lugar afectado, en su cuerpo, tibio para que filtre en la piel y antes de hacerle esto , hacer ver por medio del cuy, ponerle a la víctima por un par de horas, y luego hacerlo ver con el curandero, allí sale donde fue sacado sangre o sebo en la persona, urgente hacer esto y darle el medicamento, que tome y que coma en caldos tibios la grasa de oveja, y si es posible que beba sangre de oveja negra, para reponer la sangre perdida, nunca llevar al hospital, porque allí le sacarán más sangre, y lo perderán para siempre, más bien no teman porque la tos es muy fuerte y hasta podría votar sangre por la boca, suministrarle bebida tibia al paciente y que tome seguido, solo así se podrá salvar.

*Bueno al principio no creía eso pero sin embargo cuando por primera vez fui a la sierra por motivo de trabajo y los pobladores hablaban y me decían que no ande caminando solo por ahí en lugares alejados donde no pasaban la gente porque estando solo te hipnotiza más rápido. (Casi siempre ataca a las personas que andan solitarias o distraídas)

*Suena increíble pero el mito o como quiera llamarse al kharisiri es verdad, lo afirmo ya que soy una sobreviviente, nunca vi de más cerca la muerte, es horrible y bueno siempre te deja secuelas con las que tienes que vivir por el resto de tu vida, lamentablemente estos asesinos nunca tienen castigo ni mucho menos y eso indigna de verdad.

martes, 10 de noviembre de 2020

PINTORES PUNEÑOS: ALCIDES CATACORA PINAZO EN FRAGMENTOS

 












LA COYUNTURA LATINOAMERICANA: BOLIVIA

 


DAVID CHOQUEHUANCA,

VICEPRESIDENTE DE BOLIVIA. DISCURSO DE ASUNCIÓN DEL CARGO

"C

on el permiso de nuestros dioses, de nuestros hermanos mayores y de nuestra Pachamama, de nuestros ancestros, de nuestros achachilas, con el permiso de nuestro Patujú, de nuestro arcoíris, de nuestra sagrada hoja de coca.

Con el permiso de nuestros pueblos, con el permiso de todos los presentes y no presentes en este hemiciclo.

Hoy quiero compartir nuestro pensamiento en unos minutos.

Es obligación de comunicarnos, obligación de dialogar, es un principio del vivir bien.

Los pueblos de las culturas milenarias, de la cultura de la vida mantenemos nuestros orígenes desde el amanecer de los tiempos remotos.

Los hijos hemos heredado una cultura milenaria que comprende que todo está interrelacionado, que nada está dividido y que nada está fuera.

‘Vayamos juntos’

Por eso nos dicen que todos vayamos juntos, que nadie se quede atrás, que todos tengan todo y a nadie le falte nada.

Y el bienestar de todos es bienestar de uno mismo, que ayudar es motivo de crecer y ser feliz, que renunciar en beneficio del otro nos hace sentir fortalecidos, que unirnos y reconocernos en el todo es el camino del ayer, hoy mañana y siempre de donde nunca nos hemos alejado

El ayni, la minka, la tumpa, nuestra colka y otros códigos de las culturas milenarias son la esencia de nuestra vida, de nuestro ayllu.

Ayllu no solo es una organización de sociedad de seres humanos, ayllu es un sistema de organización de vida de todos los seres, de todo lo que existe, de todo lo que fluye en equilibrio en nuestro planeta o Madre Tierra.

Durante siglos los cánones civilizatorios del Abya Yala fueron desestructurados y muchos de ellos exterminados, el pensamiento originario fue sistemáticamente sometido al pensamiento colonial. 

Mas no lograron apagarnos, estamos vivos, somos de Tiwanaku, somos fuertes, somos como la piedra, somos cholke, somos sinchi, somos Rumy, somos Jenecherú, fuego que nunca se apagaba, somos de Samaipata, somos jaguar, somos Katari, somos comanches, somos mayas, somos guaraníes, somos mapuches, mojeños, somos aymaras, somos quechuas, somos jokis, y somos todos los pueblos de la cultura de la vida que despertamos larama, igual, rebelde con sabiduría.

‘Una transición cada 2.000 años’

Hoy Bolivia y el mundo vivimos una transición que se repite cada 2.000 años, en el marco de la ciclidad de los tiempos, pasamos del no tiempo al tiempo, dando inicio al nuevo amanecer, a un nuevo Pachakuti en nuestra historia

Un nuevo sol y una nueva expresión en el lenguaje de la vida donde la empatía por el otro o el bien colectivo sustituye al individualismo egoísta.

Donde los bolivianos nos miramos todos iguales y sabemos que unidos valemos más, estamos en tiempos de volver a ser Jiwasa, no soy yo, somos nosotros.

Jiwasa es la muerte del egocentrismo, Jiwasa es la muerte del antropocentrismo y es la muerte del teolocentrismo.

Estamos en tiempo de volver a ser Iyambae, es un código que lo han protegido nuestros hermanos guaraníes, y Iyambae es igual a persona que no tiene dueño, nadie en este mundo tiene que sentirse dueño de nadie y de nada.

Desde el año 2006 empezamos en Bolivia un duro trabajo para conectar nuestras raíces individuales y colectivas, para volver a ser nosotros mismos, volver a nuestro centro, al taypi, a la pacha, al equilibrio de donde emergen la sabiduría de las civilizaciones más importantes de nuestro planeta.

Estamos en pleno proceso de recuperación de nuestros saberes, de los códigos de la cultura de la vida, de los cánones civilizatorios de una sociedad que vivía en íntima conexión con el cosmos, con el mundo, con la naturaleza y con la vida individual y colectiva de construir nuestro suma kamaña, de nuestro suma akalle, que es garantizar el bien individual y el bien colectivo o comunitario.

Chacha-warmi

 Estamos en tiempos de recuperar nuestra identidad, nuestra raíz cultural, nuestro sake, tenemos raíz cultural, tenemos filosofía, historia, tenemos todo, somos personas, y tenemos derechos.

Uno de los cánones inquebrantables de nuestra civilización es la sabiduría heredada en torno a la Pacha, garantizar equilibrios en todo tiempo y espacio es saber administrar todas las energías complementarias, la cósmica que viene del cielo con la tierra que emerge de debajo de la tierra.

Estas dos fuerzas cósmicas telúricas interactúan creando lo que llamamos vida como una totalidad visible (Pachamama) y espiritual (Pachakama).

Al comprender la vida en términos de energía tenemos la posibilidad de modificar nuestra historia, la materia y la vida como la convergencia de la fuerza chacha-warmi, cuando nos referimos a la complementariedad de opuestos.

El nuevo tiempo que estamos empezando será sostenido por la energía del ayllu, la comunidad, los consensos, la horizontalidad, los equilibrios complementarios y el bien común.

Históricamente se comprende la revolución como un acto político para cambiar la estructura social, para así transformar la vida del individuo, ninguna de las revoluciones ha logrado modificar la conservación del poder, para mantener control sobre las personas.

‘Nuestra revolución es la revolución de ideas’

No se consiguió cambiar la naturaleza del poder, pero el poder ha logrado distorsionar la mente de los políticos, el poder puede corromper y es muy difícil modificar la fuerza del poder y de sus instituciones, pero es un desafío que asumiremos desde la sabiduría de nuestros pueblos. Nuestra revolución es la revolución de ideas, es la revolución de equilibrios, porque estamos convencidos que para transformar la sociedad, el Gobierno, la burocracia y las leyes y el sistema político debemos cambiar como individuos.

Nuestra verdad es muy simple, el cóndor levanta vuelo solo cuando su ala derecha está en perfecto equilibrio con su ala izquierda, la tarea de formarnos como individuos equilibrados fue brutalmente interrumpida hace siglos, no la hemos concluido y el tiempo de la era del ayllu, comunidad, ya está con nosotros.

Exige que seamos individuos libres y equilibrados para construir relaciones armónicas con los demás y con nuestro entorno, es urgente que seamos seres aptos de sostener equilibrios para sí y para la comunidad.

Estamos en tiempos de los hermanos de la apanaka pachakuti, hermanos del cambio, donde nuestra lucha no solo era por nosotros, sino también por ellos y no en contra de ellos. Buscamos el mandato, no buscamos enfrentamiento, buscamos la paz, no somos de la cultura de la guerra ni de la dominación, nuestra lucha es contra todo tipo de sometimiento y contra el pensamiento único colonial, patriarcal, venga de donde venga.

La idea del encuentro entre el espíritu y la materia, el cielo y la tierra de la Pachamama y Pachakama nos permite pensar que una mujer y hombre nuevos podremos sanar a la humanidad, al planeta, y a la hermosa vida que hay en ella y devolver la belleza a nuestra madre tierra.

Defenderemos los sagrados tesoros de nuestra cultura de toda injerencia, defenderemos nuestros pueblos, nuestros recursos naturales, nuestras libertades y nuestros derechos.


‘Volveremos al Qhapak Ñan’

Volveremos a nuestro Qhapak Ñan, el camino noble de la integración, el camino de la verdad, el camino de la hermandad, el camino de la unidad, el camino del respeto a nuestras autoridades, a nuestras hermanas, el camino del respeto al fuego, el camino del respeto a la lluvia, el camino del respeto a nuestras montañas, el camino del respeto a nuestros ríos, el camino del respeto a nuestra madre tierra, el camino de respeto a la soberanía de nuestros pueblos.

Hermanos, para terminar, los bolivianos debemos superar la división, el odio, el racismo, la discriminación entre compatriotas, ya no más persecución a la libertad de expresión, ya no más judicialización de la política.

Ya no más abuso de poder, el poder tiene que ser para ayudar, el poder tiene que circular, el poder, así como la economía, se tiene que redistribuir, tiene que circular, tiene que fluir, así como la sangre fluye dentro de nuestro organismo, ya no más impunidad, justicia hermanos.

Pero la justicia tiene que ser verdaderamente independiente, pongámosle fin a la intolerancia a la humillación de los derechos humanos y de nuestra madre tierra.

El nuevo tiempo significa escuchar el mensaje de nuestros pueblos que viene del fondo de sus corazones, significa sanar heridas, mirarnos con respeto, recuperar la patria, soñar juntos, construir hermandad, armonía, integración, esperanza para garantizar la paz y la felicidad de las nuevas generaciones.

Solo así podremos alcanzar el vivir bien y gobernarnos nosotros mismos.

¡Jallalla Bolivia! "