LECTURAS
INTERESANTES Nº 714
LIMA PERU 30 AGOSTO 2016
NEOCONVIVENCIA
César
Hildebrandt
Tomado
de “HILDEBRANDT EN SUS TRECE” N° 312, 26AGO16 p. 12
Thorne
quiere congraciarse con el fujimorismo. Zavala quiere congraciarse con el
fujimorismo. PPK quiere muchas veces congraciarse con el fujimorismo.
El
fujimorismo no quiere congraciarse con el gobierno. El fujimorismo piensa
minarlo, arrinconarlo, descerebrarlo. En todo caso colonizarlo. Y lo está
logrando.
Con
el fujimorismo no se juega. Es una máquina mafiosa hecha para disolver
adversarios. Ni Throne ni Zavala ni PPK no saben con quienes están jugando. A no
ser que no estén jugando sino haciendo ensayos para un nuevo estreno.
En
todo caso, que lo digan de una vez. Si los del gobierno piensan que no hay
grandes diferencias con el fujimorismo y si, en cambio, muchas coincidencias
estratégicas, pues entonces que pongan las cartas sobre la mesa. No hablo de un
gabinete compartido. Hablo de un poco de transparencia. Un poquito, como diría
PPK.
Y
así nos entenderíamos.
Si
eso sucediera –lo del cogobierno en la sombra, digo-, todo seria más claro. El
pepekausimo aportaría la tecnocracia académica que el sistema necesita
para mejorar su semblante. El
fujimorismo pondría las muchedumbres entrenadas por un Cecil B DeMille de las
grandes producciones populistas.
Sería
del gobierno perfecto para los intereses de inmovilismo. Y de allí saldría la
Keiko ganadora en el 2021. Toda una sucesión amistosamente programada.
Pero
esa película pasa por aceptar la cuasi dictadura congresal del fujimorismo.
Zavala está dispuesto a acatar ese mandato. Thorne y su gente también. El
pragmatismo de PPK lo predispone a cualquier arreglo.
Este
fujimorismo tácito es el que puede gobernarnos los próximos años.
Los
intrusos, los aguafiestas pueden ser el Frente Amplio y los dirigentes de las
organizaciones populares que suscribieron acuerdos electorales con un PPK
desesperado por los votos.
Ellos
son los no invitados a la fiesta. Y de su inteligencia, su energía y su
prudencia depende que esta neoconvivencia pradista no se sienta a sus anchas
haciendo lo que la CONFIEP quiere que sigamos haciendo por toda la eternidad,
De ellos depende por lo menos, dejar constancia de este nuevo fraude, la farsa
de estos tenores gubernamentales pidiendo perdón, desde las notas más altas, al
fujimorismo dominante. Ópera bufa.
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