Omar Aramayo
Solo el
fútbol salvará a nuestro país. las barras bravas, la corrupción de sus
dirigentes. La pelota y los peloteros. Solo el fútbol.
Solo la
cerveza podrá unir a nuestro país. los grandes monopolios, el consumo masivo
por varios días. Salú.
Solo
Machupicchu cuando estamos en el extranjero y somos muy orgullosos de ser
Incas. Somos Incas, pero despreciamos a los cholos y a los indios. Aquí nadie
es indio, los indios son de la india. Somos Incas.
Solo la
televisión basura puede unir a nuestro país, una voz a la vez.
Las grandes
cadenas de supermercados. Los monopolios.
Cualquier
idea o sentimiento nos divide. Ante una idea siempre hay dos puntos de vista.
Hay que oponerse al otro, es un deporte muy saludable, rejuvenece.
El dolor
más grande que tiene el peruano es aprender. Todo lo sabe. Y siempre es mejor
que el otro.
Mollendo
odia a los arequipeños
Arequipa no
soporta a los puneños. Cada 15 de agosto se arma el toletole, qué quieren estos
indios con sus danzas. Los cholos ensucian las calles. Y para los puneños no
existe un ápice de dignidad cuando la segunda generación de puneños en Arequipa
son los primeros denostadores de Puno.
Juliaca no
soporta a los puneños, que se vayan, son usurpadores, nosotros tenemos el
dinero, debemos ser la capital.
Puno no
soporta a los puneños, los arrojan, prefiere mil veces más a cualquiera que se
venga a bailar una sayita, que se ponga su quiosco de turismo o de salchipapas,
bienvenido. Y cuatro vivos que se agarran del nombre de Puno.
Y esto es
solo un ejemplo.
Sucede en
todo el Perú, costa, sierra, y montaña. los microregionalismos son bárbaros,
incomprensibles
Somos el
mismo territorio de hace doce mil años donde deambulaban distintos grupos
étnicos en busca de territorio
Asustados
por la naturaleza. A la que hoy destruimos
Para el
peruano cualquier extranjero es mejor que el peruano. Para la peruana.
Y ese es el
país ideal para cualquier ladrón que se hace al gobierno, para que otros entren
y digan: nosotros también tenemos derecho a robar
Este es el
país, el mismo que los vecinos del sur encontraron en 1880, para saquearlo
hasta los huesos.
Ese estado
se llama anomia. Ignorancia absoluta. Traición de lesa humanidad, traición a la
patria, a los padres, a los maestros queridos, a los abuelos que regaron este
territorio con su sangre, traición al futuro, traición a nuestros hijos.
Traición.
Pensar se
ha puesto muy caro, difícil, y produce ataques de pánico o cansancio.
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*el epígrafe es nuestro
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