(1904-1983)
Por: Félix
Paniagua Loza
Tomado de su libro “COMPOSITORES Y MUSICOS PUNEÑOS”,
Puno 1990 pp. 59 a 62
Literato, contador y músico, nacido el
6 de octubre de 1904 en Puno, hijo del abogado Juan Mariano Cuentas Monje y de
doña Sara Ampuero, dama arequipeña, emparentado con el Obispo Ampuero. La
muerte temprana del padre hizo que doña Sara, como Maestra abnegada y madre de
sus hijos: Víctor y Oscar estuvieran en sus años iniciales entre viajes a
Taraco, Huancané y Puno, en el Colegio Nacional "San Carlos", para
que posteriormente él ingresara a la Universidad de San Andrés de La Paz, Bolivia,
a la Facultad de Ciencias Contables.
En su niñez una de sus primeras experiencias,
que le dejó honda huella en el espíritu de Victor Cuentas, fue su traslado a
Juli, donde conoció dignas amistades y pasajes que le sellaron vivencias para
posteriores remembranzas; fuentes de profunda inspiración de esos paisajes
paradisiacos como Huaquina.
Por decisión del tío Obispo, la familia
retornó a Puno, donde vivirá con la abuela materna; matrona que le influyó, con
cuentos, anécdotas y cantos que van incubando imágenes en su mente. En el
Colegio Nacional "San Carlos", fue el alumno apreciado por su
constancia y alto sentido de responsabilidad como estudiante, continuando este
género de vida para escribir con acendrado interés y preservación en prosa y
verso magníficas producciones que revelan su natural talento y su espontánea
aptitud para las letras. La lírica empieza a tomar cuerpo, publicó relatos con
el seudónimo de "VICEMIL".
Las serenatas, fiestas y reuniones irán
perfilando su arte, declarándose presto su gran talento en la producción
musical, siendo autor legítimo de "CHOLITAS PUNEÑAS" y otras
creaciones musicales del folklore puneño.
Cuentas pertenece a la Escuela de
hombres libres y laboriosos, siempre celosos de la plenitud de su libertad
individual y política; ha procurado hacer labor efectiva, honesta y saludable.
Actuó con gran honra e integridad, nunca solicitó ninguno de los cargos
públicos. Toda vez que se le brindaba una labor admirable para el bienestar
general siempre desempeñó cumplidamente, no era para él esa distinción
decorativa, sino poderoso estímulo para servir hidalgamente los bien entendidos
intereses de Puno y el país.
Cuentas de espíritu inquieto, se
arranca del terruño querencioso, dejando en suspenso su vida familiar, amical y
fraterna; y realiza su anhelado periplo por Sicuani, Cusco y Ayacucho, cuya
narración novelada está inserta en su cuento "SOBRE EL DORSO ANDINO".
El retorno sucede pronto y luego de
trabajar en el Banco Italiano y en la Prefectura, por sus intereses personales
de superación empieza a servir en la Firma Singer, mientras estudia
Contabilidad en la Universidad de San Andrés de La Paz-Bolivia. Por designios
del destino, Víctor Cuentas recorre nuevamente gran parte del departamento de
Puno y otra vez enrumba hacia el Cusco. En 1941, radica en Sicuani, donde
conjuga amistad con José María Arguedas, el poeta laureado "El Cholo"
Luis Nieto y Alfredo Macedo Arguedas; y junto con su hermano Oscar Cuentas
Ampuero ingresan a la docencia del Colegio Nacional Pumacahua. En este bello
pueblo el Vilcanota hacen remembranzas de los ensueños de sus juventudes,
organizando conciertos, reuniones amicales de peculiar fraternidad, donde
Víctor Cuentas hace relucir su creación de hace 12 años el renombrado
"Cholitas Puneñas", de esencia y sabor puneño. Un año duró esta
conjunción de artistas y de nuevo a Puno, dedicándose a radicar en la Capital
de la República y ejercer su profesión. -
En 1955, en EL CUENTO PUNEÑO de José
Portugal Catacora, se publica "EL MISAWI", un trabajo literario de
gran fuste. Escribió un artículo en defensa de ANDRES DAVILA Y EL HUAYÑO,
exaltando el valor literario de los huayños de Dávila, a pesar que con él
discrepaba en el mensaje de las letras inspirados en el culto obsesionante y de
dolor "que arrancan ese eterno llorar, ese incansable lamento,
majadería del que parece haber perdido su varonía para siempre, entre infinidades
de mujeres fáciles y mundo brutal, ateridos de frío de decepciones y de
locura" .
Decía Cuentas Ampuero de ahí que
discrepamos con Dávila, no obstante que le aconsejó, que escribiera huavñds de
vida platónica y alegre con la entrega total del amor a la existencia.
Cuentas declara, que con Dávila
realizaron un ensayo en "LAS SANTUSAS", huayño de melodía aymara, se
perdió apenas nacido pues a Dávila no le gustaba el drama literario.
Cuentas estaba convencido de que el
folklore puneño es puro y exclusivo producto del indígena, que está pegado al
agro y a la Naturaleza.
Asimismo declaró con hidalguía que,
Dávila le ha influido en la producción de sus huayños, en las bohemias,
serenatas y en el alcohol de las albas, la vena y sentimiento de los huayños
puneños.
Certificó Cuentas, que los motivos
referidos causaron su separación de Dávila, comenzando a producir sólo sus
huayños, más con el aliento del poeta uruguayo Soyza Raly, que estuvo de paso
por Puno, tal como anhelaba cantar a la existencia, exaltando la maravillosa
policromía del Altiplano; desterrando el eterno llorar y ese inacabable
lamento.
Con estos ingredientes fecundos produjo
"CHOLITAS PUNEÑAS", sobreponiéndose al derrotismo exaltando la
belleza del paisaje y el puro amor a la vida "Precisamente una tarde
pulsando su mandolina, forjó las notas del huayño
"cholitas puneñas" o
"LARAMA KOTA". El autor declaró que con este último nombre nació el
huayño; pero posteriormente el pueblo lo denominó con la repetición del primer
verso; melodía que fue estrenada por los instrumentistas de LIRA PUNO, en sus
sesiones musicales.
Revela el
autor: "Fui dándome cuenta de que él llevaba
reminiscencia de melodías que oyera en el curso de mi niñez y de mi
adolescencia. Mi madre y mi abuela materna, ambas arequipeñas, solían cantar a
dúo nostálgicos yaravíes melgarianos". Que estarás haciendo cielo... "Fue
posiblemente el que más impresionó, después de aquel que le oyera a la
abuela paterna. Y es por esto que, inconscientemente, lo veo asomar en los dos
primeros fraseos del primer cuarteto. Los dos últimos fraseos corresponden a un
antiguo triste nacido y cultivado en el norte de Puno, que lo oyera yo por
primera vez en las arcadas penumbrosas de las aulas Carolinas durante mi
internado en ellas. El segundo cuarteto y el coro obedecen
al natural desenvolvimiento de estas bases"
Estas vivencias convergieron gestar el
origen de este huayño de raíz mestizo pandillero. Alfredo Macedo Arguedas,
conocía el origen de "Cholitas Puneñas", por informes íntimos de
Cuentas, y con estos elementos de juicio defendió los deseos de apropiación
ilícita.
"Cholitas Puneñas" o
"Laram Kota", los instrumentistas de Lira Puno, ejecutaron por
primera vez en el Cusco en 1936; por su belleza de su melodía y el mensaje de
sus letras hizo que posteriormente este huayño fuera pirateado por los
Embajadores de Quiquijana del Cusco, desnaturalizando la melodía y el mensaje
del huayño; y Judith Gonzales que cantó por las radios de Lima, presentando
como producción musical de Moisés Vivanco.
Ante estos atropellos punibles Don
Víctor Cuentas Ampuero, el 11 de junio de 1940 aclaró con una carta en el
periódico "LA VERDAD" de Sicuani dirigida por Carlos de la Riva,
denunciando la apropiación ilícita del huayño y la desnaturalización absoluta
de sus letras. Y en salvaguarda de su creación legítima, hizo imprimir la
partitura de su huayño "Cholitas Puneñas", haciendo alcance a músicos,
folkloristas, maestros, artistas, periodistas, literatos y amigos.
Las creaciones musicales de Cuentas
son: "Cholitas Puneñas", los huayños: "Atardecer",
"Altiplanía No. 2", "Rinconcito Moheño", "Noche
Carnavalera" (huayño puneño), el vals "Magdalena",
"Volcán" y otros.
Para el Tricentenario de la Fundación
Española de Puno, el Cuerpo Musical "Los Violines de Lima" previa
anuencia y entrega personal del mismo autor de la partitura de "Cholitas
Puneñas" grabaron en L/P en conmemoración de dicha fecha. Asimismo el
conocido Conjunto de la Familia Rodríguez, pidió la anuencia de Cuentas para
grabar su creación "Noche Carnavalera".
En Víctor Cuentas Ampuero, no solamente
hay creación musical, sino que fue un literato de exquisita pluma; por lo que
es requerido por diferentes revistas nacionales, colaborando con su pluma en
artículos de gran factura. Su poemario "DOLMEN", reúne su labor
lírica de versos de amor profundo, de admiración por esta Tierra pródiga del
Altiplano. Su cuento "SOBRE EL DORSO ANDINO", una narración novelada
de sus vivencias de trotamundo en los departamentos del Sur del Perú.
La inmensidad de los espacios
recorridos expande su visión; más aún los versos y las canciones pugnan salir para
conquistar más triunfos y en sus años de madurez Víctor Cuentas viaja a México,
Chile Bolivia y Argentina, países donde capta la esencia mestiza que afianza su
cariño a Puno.
NOCHE
CARNAVALERA
(Huayño Pandillero)
amarradita la
luna en creciente,
con los
flecos argentados del mantón
y tus ojazos
negros y ausentes.
y en tus
mejillas retozan los vientos
tu cintura
diminuta en plenitud
es ofrenda
al dios de los kajelos
de mil
papales floridos
y hay capullos
somnolientes
al borde de
tus corpiños.
para ti canto
este huayño
por ser la
flor de mi tierra.
aún tengo el
rumor de tus enaguas
el susurro
de los rasos, el insinuar de una queja
con “caricias”
y con “arcos” en noche carnavalera
Ver partituras en:
https://es.scribd.com/doc/271208936/Noche-Carnavalera-Huayno-Pandillero-Por-Victor-Cuentas-Ampuero
Hermosa publicación que ilustra.digno de p
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