martes, 2 de mayo de 2023

DOCUMENTOS IMPRESCINDIBLES PARA LA HISTORIA DE PUNO

 PRIMERA MUNICIPALIDAD DE PUNO EN EL RÉGIMEN REPUBLICANO

ACTA DE ELECCIÓN DE SUS INTEGRANTES

“En la ciudad de Puno; a los 29 días del mes de diciembre de 1824 años; congrega­dos los señores Capitulares en la Sala que sirve de Cabildo, y presididos por el señor Presidente de éste Departamento el doctor don Pedro Miguel de Urbina, ACORDA­RON: que, era tiempo de hacer las elec­ciones de Alcalde, Síndico, Procurador y demás empleados en Cabildo para el año entrante de 1825, y para proceder a ella según el método que se observa,

ACOR­DARON: con aquella madurez que corresponde, principalmente en la presente cir­cunstancia; y procediéndose a la votación verificada, en orden al Alcalde de primer voto, resultó electo por cinco votos de los siete que componen esta Junta, el doctor don Manuel Morel, logrando dos don Pedro Velazco- En seguida se procedió a la elec­ción del Alcalde de segundo voto, resultó electo el Capitán don Andrés Torres, por cuatro votos, logrando dos don Vicente Velásquez; uno don Felipe Arce. Pasando a elegir a los demás individuos que compo­nen el cuerpo, resultó electo canónicamente el primero como Regidor Decano y Algua­cil Mayor el Capitán don Fermín Arriaga; por segundo Regidor salió electo canónica­mente el Teniente don Manuel García, des­tinado de fiel ejecutor; por tercer Regidor de Alcalde de Aguas y Policía salió electo por votos completos don Anselmo Arce, en seguida salió electo de Síndico Procurador don Felipe Arce, canónicamente; de Pro­tector de Naturales, el mismo que funcio­naba anteriormente (en la época colonial); de Defensor de Menores a don Gregorio Gallegos, y concluidas las elecciones en el orden y forma que vá expresado, se acor­dó que los señores electos presentes en esta Capital, se congregasen en esta Sala Capi­tular, a prestar el juramento el día primero del año nuevo entrante desde el que empe­zaran a ejercer sus funciones, con lo que finalizó la Junta, firmando todos con el se­ñor Presidente, por ante mí el Secretario del Ilustre Cabildo, de que certifico.

(Fir­maron) Pedro Miguel de Urbina, Nicolás Ramírez de Tinajeros, Vicente Rodríguez, Casimiro P. Bravo, Manuel Pino, Secundino Gordillo, Buenaventura Romero, Secre­tario.                                     

ACTA DE JURAMENTACIÓN E INSTALACIÓN

“En la ciudad de Puno, a primero de enero de 1825, habiéndose congregado en la presidencia el señor Presidente, señores Capitulares del Ilustre Cabildo, señores Alcaldes, Regidores y Síndicos Procurado­res, electos por la Junta que se celebró el 29 del que expiró y procediéndose conforme a lo dispuesto por dicha Junta, prestaron el juramento en manos del señor Presiden­te; primeramente el señor Alcalde de pri­mer voto doctor don José Manuel Morel, a quien le recibió el juramento en esta for­ma ¿Juráis a Dios y a la Patria el sostener la independencia de la América, de toda dominación extranjera y especialmente de la española, sacrificándoos para ella vues­tras propiedades y vuestra vida si fuese preciso; y desempeñar con toda legalidad el cargo que se os confía superándoos en todo a las leyes sancionadas o que en ade­lante se sancionaren por las autoridades legítimas establecidas por la Patria en el Perú? A lo que respondió: “si juro”. Si así lo hiciereis Dios y la Patria os ayude y pre­mie y sino os lo demande como a perjuro y traidor a vuestra Patria. A lo que respon­dió: “Amen”. El Alcalde de segundo voto no se presentó por hallarse ausente, a quien se le ofició se presentase; y luego que llegue será recibido con todas las for­malidades de estilo, en el entretanto fun­cionará este cargo el Regidor Decano. En seguida se le recibió el juramento a los se­ñores electos Regidores don Fermín Arriaga, don Manuel García, don Anselmo Arce, don Felipe Arce, don Faustino Gordillo y don Gregorio Gallegos, con la misma so­lemnidad que el anterior y en la siguiente forma: ¿Juráis a Dios y a la Patria el sos­tener la independencia de la América, de toda dominación extranjera y especialmen­te de la española, sacrificando por ella vuestra propiedad y vida si fuese preciso; cumpliendo con los deberes en que habéis sido electos, sujetándoos en todo a las le­yes sancionadas o que en adelante se san­cionaren, por las autoridades legítimas es­tablecidas por la Patria en el Perú? A lo que respondieron: “Si Juramos”. Si así lo hicieréis, Dios y la Patria os premien, o si­no os lo demande como a perjuros y traido­res a su Patria. Concluida esta diligencia el señor Presidente y los demás señores del Ilustre Cabildo, así los entrantes como los antiguos, pasaron a la Iglesia Matriz, en donde se cantó la misa solemne dispuesta para este día. Y lo firmaron por ante mí el Secretario, de que certifico, (firmaron) Pedro Miguel de Urbina, Manuel José Morel, Fermín Arriaga, Manuel Francisco García, Anselmo Arce. Felipe Arce Villavicencio, Gregorio Gallegos, Buenaventura Gallegos, Secretario.

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[1]Don Pedro Miguel de Urbina Aparicio

Este ilustre puneño nació en el distrito de Putina, en 1778. Fueron sus padres don Matías de Urbina y doña Manuela Aparicio, siendo el pa­dre ejecutado por las fuerzas realistas en la sublevación de Azángaro, in­surgente contra el poder de la Colonia.

Verificó sus primeros estudios en el Cuzco, ejerciendo más tarde la Judicatura de la provincia de Chucuito, en tiempos de la Colonia, donde, jun­to con su labor judicial, cumplía ho­norable rol libertario en plena época de efervescencia de la emancipación.

Hacia el año 1821, cuando ya la corriente libertadora de San Martín, había culminado en la costa peruana, desplegando el pendón republicano en Lima, quedaba el Alto Perú en po­der de los realistas, quienes capitula­ron solo tres años después, a raíz de la actuación de Bolívar en Ayacucho. En estas circunstancias, fue aprisionado don Miguel de Urbina y Aparicio y cuando el Departamento de Puno hubo desligado el yugo de la dominación ibera, fue este ilustre Pa­tricio designado por sus valiosos mé­ritos e importantes servicios primer Presidente del Departamento de Pu­no, en los albores de la República que recién llegaban a Puno en 1825.

Miguel de Urbi­na fue pues, el primer mandatario político del Departamento de Puno y su actuación fue benemérita en bien de la causa emancipadora y del De­partamento en general.

Puno ha cumplido un deber pa­triótico erigiéndole un busto que des­taca su actuación, en el patio de la Casa de Gobierno, para ejemplo y enseñanza de la posteridad.



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