domingo, 7 de julio de 2024

LUCHAS INDIGENAS EN PUNO: RESEÑA DE INTERESANTE PUBLICACION

VIOLENCIA POLÍTICA EN EL SUR-ANDINO SIGLO XIX:

LO QUE NO SE DIJO DE LA REBELIÓN INDÍGENA DE HUANCANÉ DE 1866-68 Y JUAN BUSTAMANTE DUEÑAS

Autor: Alfredo Germán Cornejo Pardo. Ed. Universidad Nacional del Altiplano, Puno 2021. 638 pp.

Por: Roberto Ojeda Escalante, Centro Cusqueño de Investigaciones Históricas Enfoques*   

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ace algunos años, el antropólogo cusqueño Germán Cornejo publicó un documentado estudio sobre un personaje cusqueño del siglo XIX: Narciso Aréstegui, escritor y político de la segunda mitad de dicho siglo (Cornejo 2013). El libro resaltaba la trayectoria política y social del personaje, corrigiendo la versión oficial sobre su muerte a partir de revisar la documentación y testimonios de la época. Una interesante muestra de la utilidad de la historiografía para contrastar hechos de impunidad del pasado.

En la misma línea, nos presenta este voluminoso libro sobre otro personaje y sucesos relacionados a los del libro anterior, esta vez se trata de Juan Bustamante Dueñas y el escenario es la región de Puno, énfasis en la zona de Huancané. La investigación aborda “la vida, obra y trascendente legado político-social de un personaje de la talla de Bustamante; intencional y malévolamente ensombrecida y empequeñecida por oscuros grupos fácticos de poder de aquellos ruidosos tiempos, y las verdaderas razones que precipitaron el estallido de la rebelión” (Cornejo 2013: 31).

Como indica la anterior cita, el libro inicia con una amplia ubicación del contexto, la situación social en la región de Puno durante el surgimiento del gamonalismo, las circunstancias que propiciaron la rebelión indígena de 1866 y la militarización de la zona como respuesta estatal. Todo esto viene a contribuir con el conocimiento del proceso histórico de lo que comúnmente conocemos como “gamonalismo”, ese régimen de tenencia de la tierra sobre el que se construyó todo el sistema económico, político y social republicano andino.

“Si bien es cierto que en la provincia de Azángaro algunas haciendas se gestaron en la época colonial; sin embargo, su incremento, su expansión y su papel preponderante en el desarrollo social, económico y político de la provincia se dio desde mediados del siglo XIX”. Es precisamente ese periodo el que aborda y que produce el estallido social de 1866, porque no se trata de un proceso meramente económico, sino de múltiples acciones y reacciones que se extenderán por gran parte del siglo XX. El caso azangarino nos ayuda a comprender un proceso que se dio a lo largo de los Andes centrales, pero la particularidad que encontramos es el temprano estallido de rebeliones. Los agentes internos y externos pueden explicar esta particularidad, y allí viene la otra temática del libro: el personaje.

Cornejo explora la personalidad de Juan Bustamante, las influencias que recibió, sus viajes, sus escritos y la red de amistades que influyeron en sus ideas y acciones, que lo llevaron a vincularse profundamente a la rebelión indígena. Un apartado interesante en la investigación aborda al alter ego de Bustamante en esta historia, el coronel Andrés Recharte, responsable de la represión de la protesta indígena y del cruel asesinato de Bustamante. Cabe destacar también la pertenencia de Bustamante a la Sociedad Amiga de los Indios, primera organización marcadamente indigenista, de corta duración (1867-72) y cuyos postulados finalmente no fueron tomados en cuenta por el Estado, pero nos permite completar nuestra mirada sobre el proceso de surgimiento del gamonalismo, desde una fuerte crítica al mismo surgida en sectores urbanos que confluyeron en la mencionada Sociedad.

En una segunda parte examina la situación posterior a la rebelión y su represión violenta. La versión oficial y la versión de “los vencidos” (testimonios de Riveros y Choquehuanca), y es aquí donde ingresa el personaje del libro anterior, Narciso Aréstegui, amigo de Bustamante y enviado a la zona a investigar los sucesos, terminando presuntamente asesinado en el lago Titicaca.

“No hemos cometido, no digo un crimen, la más leve falta que menoscabe nuestro nombre bien merecido de nacionalidad, y que por el contrario los titulados pacificadores han manchado con toda clase de crímenes...”  Testimonio de Manuel Modesto Choquehuanca (Cornejo 2013: 490).

La extensión del libro se debe a una gran cantidad de transcripciones y análisis de documentos de la época, lo que dificultaría a un lector común de estos tiempos, pero el autor considera necesario para sustentar cada uno de  los puntos que va desarrollando. Por eso también, incluye fotografías de varios de los documentos mencionados: publicaciones, memoriales, oficios, tanto de personajes estatales como de algunos elaborados por la población indígena. El afán de contrastar las versiones es pertinente, visibilizando a los sectores  del conflicto:  por un lado, los gamonales y autoridades vinculadas  a  los mismos; por el otro, los reclamos indígenas y el de sus aliados tipo la Sociedad Amiga de los Indios.

La prosa de Cornejo es por momentos enrevesada, con tintes literarios que le dan mayor énfasis a sus argumentos, pero también peca de exceso en algunos momentos, especialmente en algunos títulos. Otro aspecto que podría haber ayudado a reducir la extensión del libro está en aquellos contenidos ya abordados en su libro sobre Aréstegui, y que bien podría solo haberlos referenciado. Aun así, es también cierto que contar con toda la información en un solo libro ayuda al lector y/o investigador que revise sus páginas.

En resumen, el libro ayuda a comprender varios aspectos de nuestra historia republicana comúnmente dejados de lado. El largo proceso de surgimiento del indigenismo, que no aparece en el siglo XX como comúnmente se indica, tema ya planteado por Tamayo Herrera en su Historia del indigenismo cusqueño (Tamayo 1980), donde este remonta antecedentes indigenistas al siglo XVI; sin embargo, para precisar el contexto, el indigenismo propiamente dicho aparece como respuesta al creciente racismo republicano. El otro aspecto es precisamente el de las acciones en torno al crecimiento de las haciendas, tanto por parte de los gamonales y sus aliados, como el de las respuestas indígenas y sus aliados. Y finalmente, para una historia de las ideas, resulta útil la amplia exploración sobre las influencias ideológicas de Bustamante y sus compañeros, como reflejo de los impactos de las “nuevas ideas” que recorrían Europa. <>

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Referencias bibliográficas

Cornejo Pardo, Alfredo Germán (2013). Violencia política en el surandino siglo XIX: Asesinato del novelista Narciso Aréstegui. Puno: UNA.

Cornejo Pardo, Alfredo Germán (2021). Violencia política en el sur-andino siglo XIX: lo que no se dijo de la Rebelión Indígena de Huancané de 1866-68 y Juan Bustamante Dueñas. Puno: UNA.

Tamayo Herrera, José (1980). Historia del indigenismo cusqueño. Siglos XVI-XX.  Cusco: INC.

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