EFERVESCENCIA...DE IDENTIDAD,
RITMO Y COLOR.
P
|
uno hoy despertó más temprano que nunca, con fuegos
artificiales y bombardas, desde la madrugada, dando la bienvenida a
propios y extraños, se engalana con danzas autóctonas y típicas, de los lugares
más recónditos de la Región.
Es Cultura Viva, qué vibra al compás de su música y
tradición, en honor a la Virgen de la Candelaria, festividad declarada como
Patrimonio Cultural e Inmaterial de la humanidad.
Es el LVI Concurso de danzas que conservan su esencia e
identidad. Los trajes típicos revalorizan los tejidos ancestrales, con colores
llamativos que reflejan las flores y productos de cada zona. Niños, jóvenes y
ancianos se han preparado con ansias y entusiasmo, con previos ensayos, es la
fiesta de la familia.
Cada provincia demuestra lo mejor en este Concurso Regional
de danzas autóctonas, presentado en el Estadio Enrique Torres Belon. La actividad
se desglosa en dos días, esta vez 1 y 2 de febrero en curso; ello por la
cantidad y calidad de sus representantes, 61 conjuntos danzaron ayer sábado y hoy
domingo 2 de febrero lo hacen otros 60 conjuntos.
Y es que estas participaciones van creciendo en entusiasmo y
cantidad, de allí los dos días de presentación. Los instrumentos son típicos,
resaltan los pinquillos, tarkas, zampoñas, quenas. Los atuendos son confeccionados
con tejidos, matizados con colores hermosos y vivos, los sombreros de las damas
adornados con flores multicolores. La música es acompañada por el canto
colectivo en castellano, quechua y aymara, a viva voz, con toda la fuerza y
energía.
Vibra el estadio ante aplausos y admiración de lugareños,
turistas nacionales y extranjeros. Todos hermanados al compás de alegría,
danza, música y algarabía qué año a año abraza orgullosamente en esta expresión
de Cultura Viva y estoica, del Perú profundo, abrazada por el lago navegable
más alto del mundo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario