Geografía, tierra y
paisaje: afirmando la identidad
CONVERSACIONES CON
JAIME HERNÁN CORNEJO-ROSELLÓ DIANDERAS
por Jaime Barrientos Quispe en LOS ANDES 16/06/2019
Un hombre comprometido con el desarrollo y por
pensar Puno, su aspiración y la visión le permitió encaminar en tertulias y
reuniones a una generación de jóvenes con predisposición en antaño, que hoy dan
luces y horizonte a su terruño. Conversó con el Suplemento Rumbo al
Bicentenario para compartir sus ideales con los cuales invoca a la presteza y
afirmación de la identidad en los restos que le toca vivir a nuestra región.
La
geografía del Altiplano-Titiqaqa es singular. Es sustento y fundamento de la
meseta más elevada de América del Sur, con vertientes de agua que avenan al
propio sistema lacustre. Esa geografía es un fin en sí mismo, como alguna vez
nos lo explicara el mismo entrevistado de hoy; no distribuye agua a ningún otro
sistema y vive de sus propias vertientes y del agua del cielo. Sobre esos
tópicos y los inherentes a desarrollo e identidad, así como a los términos de
afirmación de la geografía y del paisaje como heredad intransferible,
conversamos con Jaime Hernán Cornejo-Roselló Dianderas, puneño y analista de
nuestra realidad desde el arte de la danza y la coreografía, hasta la
literatura y el mundo de las comunicaciones ideadas desde APAFIT, la Agrupación
Puno de Arte Folclórico y Teatro y desde los “7 Ciudadanos” a través de
innumerables publicaciones, como las entrañables e inhallables “Hojas
Escritas”, “Calle Puno” y “EscriViendo”, y en radio y TV desde “Cultura
Política” y “Alta tensión”, apuntalando su pasión puneñista desde su
perspectiva de agrónomo y comunicador. Aquí la conversa con un personaje
suscitador de emociones y persuasivo como pocos.
1.- El Perú ostenta una diversidad ecológica de varias
zonas climáticas y paisajes distintos, con selvas tropicales, altas,
cordilleras y desiertos. ¿Con que diversidad ecológica cuenta Puno?
Empecemos sobre la plataforma en la que vivimos, que es una
región con 72 mil kilómetros cuadrados de Altiplano y cordilleras Oriental y
Occidental y de selvas altas y bajas, donde se evidencian pisos ecológicos
definidos por la altitud, así como por latitud y longitud de una topografía
especial por la presencia del lago Titiqaqa. En América del Sur la
geografía de la región Puno, es singular y más acusada que la propia
prolongación de la inmensa altiplanicie. De hecho, Jaime, el norte del Titiqaqa
es el escenario que más agua recibe del cielo y el más apto para la
agricultura.
Te digo que en el Altiplano la zona climática es casi
estándar con micro climas en las zonas circunlacustres y las praderas y severo
clima en las cordilleras y sus estribaciones, así y todo, el espacio
altiplánico y cordillerano tiene clima casi similar, donde lo más
característico es la severidad de sus manifestaciones de lluvias copiosas con
inundaciones lentas y apacibles o de sequías que aniquilan y diezman a lo que
se suman tormentas eléctricas espectaculares como si Júpiter tronante hablara
y, para nuestro caso, fueran los Dioses del Agua y del Cielo que dialogan y
periódicamente reclamaran silencio.
Todas esas manifestaciones a algunos los aflige emocionalmente
y para otros es causal del débil desarrollo económico; pero, felizmente, no
detiene la adaptación humana que continúa venciendo a la impericia de gestión
de las autoridades que casi en 500 años no han enfrentado la propia severidad
del clima administrando racionalmente el agua que es esencial para la vida, sin
sobresaltos entre nosotros los altiplánicos. Así y todo, hombres y mujeres del
Altiplano con sus aciertos o imperfecciones todavía son ejemplo de adaptación.
2.- ¿Entonces explotamos debidamente nuestras zonas
ecológicas potenciando nuestra variedad?
Claro, sigamos. No explotamos debidamente nuestras zonas
ecológicas que son bien estables en praderas y valles estrechos y marcan un
fácil derrotero de intervención tecnológica. En las selvas altas y bajas
y en el llano amazónico la situación es diferente. Allí la variedad ecológica
de flora y fauna es sorprendente. Tenemos árboles donde, por ejemplo, uno solo
de ellos, alberga a más de 50 especies de hormigas diferentes, tenemos aves aún
no catalogadas y especies ícticas no explotadas debidamente, etc. Vivimos al
Norte del Trópico de Capricornio, al medio de un espacio mediterráneo de
América del Sur, que fija un escenario especial con un mar interior como el
Titiqaqa, cuya presencia favorece la vida. Sin él, seríamos tundra andina
helada e inhóspita y lo grave es que a la mentalidad de las generaciones
actuales no ha ingresado la geografía y el paisaje como componente vital de la
existencia. Te reitero, no explotamos debidamente la potencialidad que nos
ofrece la naturaleza.
El escenario de 70 mil kilómetros cuadrados que suma Puno,
es un vergel débilmente explotado por el hombre altiplánico de hoy que, por
ejemplo, vive cada vez más alejado de la selva, a la que conoce por
esquemáticos y simplistas ejemplos escolares. Respecto a la comprensión y
actuación eficaz sobre el ambiente estamos a la zaga, pese a intervenciones
encomiables como en la producción de café y punto.
3.- ¿Cuál es el espacio geográfico que conforma y
delimita al Altiplano?
El Altiplano abarca cerca de 200 mil kilómetros cuadrados y
empieza, como lo señala Emilio Romero, en La Raya, en el límite occidental de
la región Puno, camino al Cusco, cuando empiezan el descenso y las
estribaciones de la Cordillera de Vilcabamba se presentan aun tímidamente con
el hilo tenue del río Vilcanota, que nace en los nevados de Puno y, bueno, el
inmenso Altiplano acaba, luego de descensos de altitud, pero siempre en
extensas praderas, en Tucumán en la quebrada de Humahuaca en Argentina.
El Altiplano es una ecorregión que no mereció ser calificada
como tal por Antonio Brack Egg, cuya lógica de delimitación eco sistémica y de
definición de ecorregiones, no distingue las particularidades de flora y fauna
que posee el Altiplano. En el Perú, prima el etnocentrismo limeñista y las visiones
desdeñosas sobre las peculiaridades socio culturales y de economía de Puno.
Nuestra proximidad a Bolivia, no es calificada como potencialidad, sino como
debilidad y mala consanguinidad.
4.- A muchas personas se les escucha decir que Puno,
presenta una geografía adversa. ¿Realmente Puno, tiene una geografía
adversa para su desarrollo?
Es una afirmación falaz, porque desconoce las
potencialidades que pese a adversidades y particularidades posee cualquier
espacio geográfico en el planeta Tierra; hasta los más hostiles territorios y
agresivos para la vida como, Tíbet, Nepal o el Himalaya y aún los desiertos más
inhóspitos evidencian características que favorecen la existencia. Solo hay que
conocer los productos que la naturaleza distribuye en esos lugares. Obviamente,
cuando se pretende explotar el territorio con criterios de capitalismo rentable
y utilitarista a ultranza y elevar la productividad a extremos de alta
competitividad, la situación
cambia. Para el caso del Altiplano peruano, con la
presencia del lago Titiqaqa, el basamento de la economía es la producción
agropecuaria estable y sin fatigar los recursos como se hace en EE. UU. en
grandes granjas o factorías de crecimiento y engorde animal, donde para
producir un kilo de carne se gasta 20 mil litros de agua. Ahora, nuestra
realidad agropecuaria está totalmente desdeñada y distanciada de la toma de
decisiones por los gobiernos locales y por el Gobierno Regional. Ninguno
dimensiona la importancia de la ganadería y de la agricultura andina.
5- ¿Las características geográficas naturales que
presenta Puno, tienen un rol causal en la evolución del bienestar de los
hogares?
Esta es una interrogante cuyas respuestas no son precisas,
primero por la ausencia de estudios de caso y específicos al respecto, y
segundo por la realidad de desarrollo social deficitaria que padecemos. Te lo
explico. Nuestra pobreza no es responsabilidad de la geografía, ni del frío. La
pobreza ancestral que padecen los habitantes del campo surge por la nula visión
de integración socio cultural del campesinado arrinconado por siglos y ajeno a
la tecnología. Esa realidad de pobreza es atribuida ladinamente como
consecuencias de la severidad climática. Más que la geografía hostil y la fría
altura ha sido y es la inconveniente inserción social la que nos prosterna.
Antes que la adversidad del clima es la deficiente visión de propiedad rural
productiva la que nos ahoga, es el deficitario manejo del recurso agua lo que
nos hace vulnerables. La mediana y pequeña propiedad rural como Tambo Queque en
Melgar, es ejemplo en Europa de calidad productiva. Ese ejemplo, es una
solución que no se piensa porque en Puno, los operadores del desarrollo han
decidido no decidir. Pacomarca, aunque en manos extranjeras a Puno, es también
ejemplo de investigación y producción de fibras de alpaca que benefician a
todos menos a los puneños. ¿Por qué no replicar experiencias parecidas? Si en
Puno, hay una pésima geografía es la deteriorada geografía mental de quienes
nos gobiernan y el uso malversado que hacen del poder.
6.- ¿Puno, al presentar variables geográficas, es una
razón para que no tenga crecimiento regional?
No, eso no es exacto. Reitero, antes que imputarle nuestras
precariedades a la geografía de altura, sosteniendo que la altiplanicie y la
seriedad climática nos prosternan y nos ponen de rodillas, tenemos que en Puno,
el principal déficit es el Desarrollo Humano hasta hoy no alcanzado con
inteligencia y visión previsora. Seamos claros. A Puno, se lo tipifica como
Sierra siendo mayoritariamente una ecorregión altiplánica sedienta de agua y se
le endosa el calificativo racista de ser parte de la “Mancha India” con la que
caracterizó el APRA del siglo XX al Sur andino; entonces es fácil sumarle a
esos discriminatorios y excluyentes conceptos de que la gran culpable de
nuestro atraso es la geografía con un bloque de habitantes precarios ayer
llamados indios y hoy campesinos, siendo ambos una fuerza histórica a la que se
ata de manos, antes por los inicuos sistemas de explotación y hoy por la
anarquía y falta de visón existente que prohíja la informalidad, el
contrabando, la exclusión y lo peor, la emigración. Con manejo adecuado de los
recursos naturales, de recursos de capital bien invertidos y de personas
amantes del ambiente el Altiplano podría convertirse en un vergel.
7.- ¿Afectan las diferencias geográficas a los niveles de
vida de los pobladores de Puno?
En mi concepto más que ello es la tenencia de la tierra, el
minifundio, la lotización improductiva hasta la actual vigencia de Comunidades
Campesinas que en su mayoría son centros muertos para el progreso por la gran
ociosidad de sus tierras a las que, sin serlo las han convertido en baldíos
improductivos ¿Por qué se da el crecimiento cancerígeno de las ciudades en
detrimento del espacio rural? Porque no sabemos gestionar el desarrollo con
racionalidad y equilibrio y solo nos dedicamos a construir infraestructura, que
es necesaria, pero que no debe ser dominante y excluyente que posterga
decisiones en pro del despegue agropecuario. Antes que variaciones de nivel
geográfico, tenemos desniveles mentales entre quienes nos gobiernan. Para el
caso, manejando una metáfora, te diré que más que biodiversidad climática hay
unilateralidad mental, solo se piensa en cemento que simplifica la realidad y
destruye el paisaje.
8.- ¿Existe un estudio o libro que ofrece una descripción
detallada de la geografía de Puno, concretamente de las principales áreas en
las que la geografía juega un papel fundamental para el desarrollo económico?
Sí, los hay, desde los aportes cimeros del siglo pasado como
la Monografía de Puno de Emilio Romero o los libros de Alfonso Torres Luna, los
de Modesto Basadre o lo parcial de Raimondi, hasta las descripciones de varios
ilustres viajeros de los siglos XVIII y XIX, que son indiciarios y no
exhaustivos, aunque sí bien motivadores. En el tiempo actual la carencia es
visible porque solo se han aglomerado datos estadísticos con visión de fría
geografía económica y propuestas de explotación de recursos centrados en
ciertas líneas maestras de desarrollo por cuencas y microcuencas. Ahí tenemos
los 7 tomos del plan que CORPUNO trabajó en los años 60 en el marco del Plan
“Puno-Lampa” con estudios de suelos y potencialidades económicas de territorios
de la zona norte de Puno; es decir, la geografía está presente pero no ingresa
al debate ni se conoce sus potencialidades diferenciadas de, por ejemplo, micro
flora. No hay análisis de las particularidades geográficas del escenario donde
vivimos, salvo ahora último de trabajos específicos sobre ecología de avifauna
y flora del Titiqaqa. En mi concepto es urgente y también necesario crear en la
niñez y en la juventud puneña conciencia geográfica y no solo instruirlos en
las visiones apocalípticas de temor y aflicción ante el cambio climático.
9.-En “La Riqueza y Pobreza de la Naciones” David S.
Landes, sostiene que el clima templado de Europa incentivó el trabajo duro y el
desarrollo capitalista, mientras que el calor de los trópicos hizo que se
dependiera de esclavos según Eichengree, ¿pese a tener una diversidad de pisos
ecológicos, los puneños no hemos entendido la diversidad? ¿No se ha comprendido
la herencia de estas diferencias o diversidades?
El tema es de poder y de conocer quiénes fueron dueños del
escenario y armaron y arman la tramoya, definen la escenografía y dotan de los
aditamentos del caso para la puesta en escena que van a representar. Y saber
también quiénes han abandonado hoy el escenario y hacen todo menos desarrollo.
Estoy persuadido por las elevadas cotas de desarrollo agropecuario que
anteriormente se alcanzaron en Puno, que la geografía no es impedimento para
generar bienestar y calidad de vida en nuestra región, al contrario, nuestro
territorio es un gran repositorio que podría albergar a mucha población con
pleno bienestar. Falta conciencia geográfica
|
AREA ALTIPLANICA |
10.- ¿Cómo debería ser el manejo de la biodiversidad para
el desarrollo regional puneño?
Hay que iniciar investigación ambiental y despojarse de
prejuicios, por ejemplo, de atribuir esterilidad a las laderas cordilleranas
que no son eriales y poseen cierta humedad, cuando en ellas se albergan
especies de briófitas y pteridofitas cuyos rizomas contienen principios activos
que benefician la salud. En todo caso, hay en el escenario de Puna,
aparentemente estéril, vida que ignoramos y no investigamos con flora oculta
que debemos descubrir. ¿Cuántas fueron las plantas y los especímenes vegetales
que desdeñó el conquistador? Miles. Nuestra quinua y cañihua han recuperado
vida visible, recién en las últimas décadas. ¿Tendremos otras especies, otros
granos ocultos de gran valor nutritivo, contenedores de alcaloides?, no lo
sabemos. ¡Pero investiguemos! No nos quedemos impávidos mirando el mismo
cuadro.
11.- ¿Cuál es tu percepción geográfica del espacio, los
lugares y el medio ambiente de Puno?
Es de una amalgama de realidades que se superponen y te
provocan emoción o impaciencia y hasta frustración. Nuestra gente convive
inconmovible con el deterioro ambiental y cree que la pampa o la calle son
desagües y que los desagües son almacenes aptos para engullir plástico,
cáscaras, y todo material urbano doméstico. Un desastre. Pero hay otro
escenario y es el de la geografía puneña aún no contaminada que es placentera y
aleccionadora a la que debería retornar la población con cierta periodicidad.
12.- ¿Habrá conflictos que se derivan de la interrelación
entre el medio ambiente, la sociedad y la economía puneña?
Ante una realidad social y económica de permanente
indefinición con retraso de resultados, lo más probable es que el deterioro de
las relaciones de convivencia y vigencia de valores humanos se pierdan, y surja
la vileza de la sobrevivencia en pie de guerra. Ya estamos perdiendo
ecuanimidad social a todo nivel. Tenemos territorio apto para la agricultura y
la ganadería que no es explotado y que es tabú analizar, como ya lo dije, el
rol improductivo de las Comunidades Campesinas que hoy no son ni chicha ni
limonada.
13.- ¿De qué manera el conocimiento geográfico es
importante para la evolución de la civilización humana? ¿Qué papel desempeña en
predecir y afrontar el futuro?
La naturaleza con todas sus manifestaciones que han forjado
ciencias como la geografía, geología, zoogeografía, ecología, etc., no solo
deben tener aproximación científica y tecnológica, sino de acercamiento humano
a lo que propicia la vida de los humanos como es la naturaleza a la que en la
actualidad se destripa y despanzurra mediante explotaciones mineras
destructivas del ambiente. Solo hay conocimiento geográfico para la explotación
de recursos y la optimización de la depredación.
Ahora, sí es posible que en nuestra geografía encontremos
alternativas para paliar o resolver las previsibles hambrunas o carencias
específicas de nutrientes. Como no conocemos a plenitud nuestros recursos
es probable que muchos de ellos vivan escondidos a nuestros conocimientos. A
partir del análisis a profundidad de nuestra naturaleza es posible desarrollar
ciencia y tecnologías adecuadas, aunque en Puno, estamos en pañales en cuanto a
investigación y ciencia.
14.-Las estaciones en el Altiplano puneño, ¿presentan
colores? Me constaste una vez que el niño puneño del campo distingue una gama
de colores que el niño urbanita no ve.
Por supuesto que sí. Esa anécdota concursal me la contó “El
Toto” Teodoro Núñez Rebasa. Nuestras estaciones nos prodigan su colorido según
su cercanía al agua, al sol que surge o declina, al sol frío o caliente,
al
roquedal y su perfil en el horizonte, además que se proyectan magníficamente en
atardeceres y amaneceres como lienzos con veladuras especiales de verdes
espumosos de primavera o de intensos morados del verano o plomos densos en
invierno. En fin, cierra los ojos y desarrolla tu propia película.
Tengo en la mente una descripción de Luis E. Valcárcel que
antes de morir hizo de Puno, en el Dominical de El Comercio que habla, lleno de
sorpresa y emoción, de cielos morados, de nubes rojas, de laderas surrealistas
de verdes y anaranjados y lilas conformando todo un carnaval terrestre inmóvil
y alucinante. En fin, si nuestras emociones congenian con el paisaje tendremos
oportunidad para la reflexión o la maravilla. Hay paisajes curativos y anti
estresantes como los del norte del Titiqaqa en Suasi, Moho o paisajes de una
adusta manifestación metafísica como en las peñolerías y praderas de Azángaro.
El tema es tener ojos para ver y voluntad para pensar y,
según sea el marchante, admirar, conmoverse o ser indiferente; obviamente, a un
urgido comerciante o a un afligido sobreviviente, la naturaleza orfeónica de
Puno, le tendrá sin cuidado. Y esa es una de las causas de nuestro desapego por
Puno, porque vivimos en permanente emergencia. Vivimos en Puno, porque lo
utilizamos como catapulta para enfrentar necesidades irresueltas, porque cada
día son más los urgidos, los afligidos, los impacientes y los descreídos que
como caminantes blancos viven ignorando el paisaje y anhelando vivir en medio
del cemento y los edificios castrantes de las ciudades.
15.- ¿Dijiste alguna vez que el Titiqaqa era el gran
compositor andino y que funciona como ente genitor de la vida de Puno?
Quienes vivimos sintiendo como inspiración y sedante
emocional la magnitud del paisaje que a diario se renueve en la amplitud del
Altiplano, que es el compañero inconmovible del Titiqaqa, sabemos a ciencia
cierta o por comunicación infusa que el gran hacedor de las melodías
trascendentes surgidas desde la ciudad de Puno y de otros confines, es el
Titiqaqa que predispone a que almas sensibles se inspiren en su inmensidad
lacustre y compongan bellas músicas ante el encanto diurno y nocturno de su
agua metálica para que transmitan a sus congéneres mensajes de
consubstanciación con esa maravilla que es vivir en la altura y en el ventanal
más próximo al universo. Dicen que el Titiqaqa inspira, yo sostengo que el
Titiqaqa compone y nosotros transcribimos, pero sin duda, hay que ser elegido
para gozar y vivir ese trance.
¿16.- Y por supuesto, qué significa, por lo tanto, vivir
a 3812 msnm., es alquimia del saber, es encuentro con alguno de los manes de la
creación?
No lo sé, pero percibo que el Titiqaqa subyuga y enamora. En
ciertos lugares uno puede estar horas de horas mirándolo y caer en trance de
inmortalidad. Nos cuenta la historia, que pocos conocen, que Túpac Inca
Yupanqui y luego su valiente y precoz hijo Huayna Cápac, antes de tomar
decisiones trascendentes y quizá controvertidas como iniciar combates y
guerrear contra los adversarios de turno, arribaban al Titiqaqa para encontrar
reflexión y consustanciación con el universo que refleja nuestro mar de agua
dulce, y desde allí dialogaban con el Sol en la altura más serena para vivir la
intensa conmoción de comunicarse con los dioses del agua y del cielo para tomar
decisiones trascendentales. Lo mismo hacía Mariano Hilario Cornejo Centeno, el
gran sociólogo y orador inigualado que reflexionaba en Puno y, al calar las
inmensidades pedagógicas del paisaje altiplánico, se nutría de sabiduría,
intensidad y aproximación a la verdad. Hoy lamentablemente los poderosos
eventuales eluden la reflexión y solo se aproximan a la accidental hipocresía
del rezo festivo. Nada de encuentro con la naturaleza y todo ahora es un falso
solfeo y un persignarse efímero.
17.- ¿Puno es altura infinita? ¿Es la región, donde la
pradera es interminable?
Puno, será siempre poesía geográfica y ojalá con el tiempo
deje de ser precaria realidad socio económica por los elevados índices de
deterioro a los que hemos llegado en una espiral indetenible de desorden en
todo orden de cosas, donde las autoridades contaminan todo lo que tocan y las
familias se dejan contaminar, aunque algunas resisten, pero la avalancha es un
alud arrollador de malas costumbres, de arribismo, ventajismo individualista y
hasta de “excelencia exitista” que las mismas universidades promueven,
alejándose de la sensatez y la ecuanimidad, anhelando ser ricos para tener de
todo y no usar nada; por eso, no solo requerimos equilibrio ecológico, sino
equilibrio educativo y afirmativo de identidad a través de la recuperación de
la geografía como paisaje, para aproximarnos a nuestra más bella heredad que es
el Altiplano-Titiqaqa y consumir poco sin violentar a la naturaleza.
Y aquí deseo detenerme sobre una consideración. El telurismo
fue desdeñado y motejado por la arenosa mentalidad costeña que denigró el
pensamiento andino vinculado al paisaje sin admitir que la tierra en la que uno
vive, sea cual fuere, produce una atracción casi genética que debemos
recuperar. Persona que no tiene tierra en las manos no puede dar frutos y si
bien esta es una metáfora, se alude con ella a que el campo es vivificante y
afirmativo de la personalidad. Y Puno, no es Siberia ni tierra de castigo como
afirmó Mario Vargas en Pantaleón y las visitadoras. En esa línea no solamente
debemos reconstruir nuestro paisaje alterado por tanta contaminación, sino
volver hacia él y afirmarlo en nuestra mente y nuestra ideación y quizá hasta
ensoñación. ¿Cuántos puneños desean volver al campo puneño?
18.-La orografía puneña está representada por los andenes
que son escaleras para ascender a la altura. ¿Qué significa y qué beneficios
ofrece?
Son una propuesta inteligente de manejo de la tierra en
territorio abrupto y de valles estrechos y cortados, que, además, por los
microclimas que generan favorecen la producción. Entre Ayapata y Usicayos,
hasta Limbani, Phara, Patambuco, Cuyocuyo Sina y Quiaca tenemos un colosal
anfiteatro de andenes que la incuria y el trastorno de la economía emergente y
proto capitalista, ya echaron a perder. A través de varios proyectos y algunas
ONGs se pretendió reconstruir andenes, pero todo lo que proviene de la
administración pública significa emprendimientos momentáneos e insostenibles,
encubiertos de innovación y necesidad para maquillar el uso oportunista e
indebido de recursos. Los andenes son necesarios y en las estribaciones y
contrafuertes que lindan con el Altiplano se pueden reinstalar y atenuarían la
desertificación y la erosión. Es el caso similar de los Waru waru, que fue una
inteligente adaptación casi de arquitectura de curpas o lechos elevados para
contrarrestar el frío nocturno de la pradera, creando con el agua mini
microclimas al pie de la cama.
19.- Yendo a otro tema ¿Se puede decir que la selva es
virgen? En Puno, ¿existen santuarios de la naturaleza?
La virginidad es un concepto religioso que enerva el
entusiasmo, así como la religión católica, mediante sus predicadores atemorizan
y asustan, así la virginidad paraliza, (risas). Quizá la selva no explotada sea
una selva que amerita ser investigada, pero el futuro compensatorio, la vida,
la producción y los asentamientos humanos descansan en la ocupación razonable y
sensata de nuestro llano amazónico. Ya perdimos Mazuco y Huaypetue porque, al
no ocupar ese nuestro territorio desde antes que se inaugurara la carretera que
pasa por Mazuco y unió Cusco con Madre de Dios, perdimos esos territorios.
Ahora el triángulo septentrional de Puno, se achicó sin ser desfigurado,
solamente en el mapa se le bajó el ángulo que era en los 13 grados de latitud
Sur en el río Chaspa, hasta los 12 y pico de latitud Sur en la confluencia del
río Marcapata. ¿Y nosotros? Viviendo en la ignorancia geográfica y limítrofe.
20.- Pasemos a Gamaliel Churata y a Manko Kápak, de la
literatura rupturista y creativa al mito fundativo, ambos como fuerza expresiva
que sustentan por qué ellos son importantes para Puno, en el tema del agua.
No se ha sustentado, sino de manera poética y a nivel de
algunos fogosos ensayos churatianos el tema específico del agua, que está
implícito en nuestro primer heresiarca. No obstante, te diré primero que el
mito de Manko está languideciendo porque su alusión es una vez al año y cuando
sale en noviembre del Titiqaqa se queda en la ciudad de Puno, y no enrumba
hacia el norte en enero y luego, camina por los siguientes meses anudarse con
los festivales del Kápak Ñan y de Tinajani, hasta llegar a La Raya y de ahí, si
los cusqueños recepcionan a Manko rumbo al Inti Raymi, bien, y si no, también,
para nosotros sería un gran acierto turístico y vitalizador del mito dejar al
inca rumbo al Cusco.
Gamaliel Churata, es otra estación en el espíritu. De él se
desprenden varias suscitaciones. Para el caso, su aproximación a la geografía
es esencial desde la mitografía animada del Titiqaqa. Sus aportes son
constructivos y educativos en todas sus reflexiones y engloban lo ambiental
como en “Preludio de Koncachi” y en otros ensayos. Churata es de lectura diaria
porque inspira. Y el agua del Titiqaqa fue su principal combustible anímico.
21.-La vegetación de las cochas consiste en tener
abundantes plantas acuáticas, además de la crianza del agua. ¿Qué otras
alternativas ofrecen como sistema hídrico?
Plantean un adecuado y doméstico manejo ambiental
complementado con los corrales andantes para que pernocten las ovejas y las
reses que así, noche a noche, van abonando el suelo con sus boñigas y su bosta.
Ese racional y delicado manejo cotidiano del ambiente se está perdiendo
paulatinamente, ahora, “hoy por hoy”, como decían los profesores carolinos de
los años 70 para enfatizar el presente inmediato, nuestra agricultura se maneja
por inercia y sin iniciativas.
22.-En los pastizales predomina la vegetación herbácea.
Estos ecosistemas son de origen natural constituyendo extensos biomas, o son
producto de la intervención humana con fines de la crianza de ganado o
recreación. ¿En Puno, existen pastos naturales? ¿Se les aprovecha
satisfactoriamente?
No se les aprovecha y, por temas de productividad se ha
homogeneizado los cultivos con forrajes que son cultivos estándar sin
considerar las propiedades diferenciadas de los pastos naturales, que son
reemplazados por pastos cultivados de mayor rentabilidad. Este proceder no es
adecuado y se ha impuesto en el Altiplano desde hace más de medio siglo, ya
desde la época de las haciendas.
Sobre el tema no hay opinión de la Universidad Nacional del
Altiplano, sino acatamiento a lo que aconsejaron los ingenieros formados en la
Universidad Agraria de la Molina. Estamos perdiendo la piel natural de las
praderas altiplánicas con gran aceptación de los que negocian y engordan
ganado. ¿Desandar el camino? Casi imposible.
23.- El mundo se está quedando sin agua dulce. La
humanidad contamina, malgasta y agota la fuente de vida a un ritmo alarmante.
¿Hay urgencia para administrar el recurso agua en la región Puno?
Por supuesto y no solo con fines preservativos del ambiente,
que es crucial para la seguridad alimentaria, sino con fines educativos.
Finalmente, te diré Jaime, que en todo este proceso
investigativo que has emprendido conmigo y con mis conocimientos quizá
parciales, pero, entiendo plenos de entusiasmo y emoción por Puno, me queda
decirte que ser puneño debería significar actuar con presteza y afirmación ante
los retos del presente, sin embargo ser puneño es ahora evasión y emigración y
cuánto desearía que fuera todo lo contrario, que fuera afirmación de vida y alegría
para vivir y consubstanciarse con el paisaje. Tengo vívido el recuerdo de mi
padre Carlos Renato que me hizo conocer Puno, de Sur a Norte y de Este a Oeste,
en carro, a pie y a caballo. ¡Ah, aquellos tiempos!