LOS ARRIEROS
Escribe: Jesús Santisteban Ávila
Y cuenta la historia
que fue la experiencia de un arriero de la región de Mendoza quien dirigió el
paso de los Andes, al ejército libertador de San Martín.
Tradición caminera
de nuestros pueblos; comercio itinerante iniciado en Cuyo, en Jujuy, Salta.
Transcurrir de horizontes, pampas y escarpados. Retornan hasta nosotros en
poesía y en música de sentir popular. Don Ata, cariñoso tratamiento saludando
la presencia de Atahualpa Yupanqui, tuvo que recorrer mucho “camino de a pie”
para recibir lecciones de guitarra. Don Ata le dedicó versos tempraneros
colmaditos de añoranza: “Es bandera de
nieblas su poncho al viento/lo saludan las flautas del pajonal/ y guapeando en
la senda por esos cerros/ el arriero va, el arriero va.” (1)
Madrugón tras
madrugón, buscador de latitudes; sonrisa abierta al viento saboreando el aroma
del valle cercano, se le oía cantar: “Desde
mi montaña nieve, viento y sol, he bajado al valle solo por tu amor. He bajado
al valle con una canción, cuita de mis penas nieve, viento y sol.”
Que aquella fue
forma de vivir en sobresalto, tal vez. Quizá el repuntar los caminos para
intercambiar cultura, nos gusta. Retornando, un canto acunado lejos interrumpe
la tarde: “Cuando de Cuyo yo vuelvo
cruzando la cordillera, ríe el corazón contento, una chilena me espera. Viva la
chicha y el vino, viva la cueca y la zamba, dos puntas tiene el camino y en las
dos alguien me aguarda.” (1)
Nosotros los
imaginamos saludando caseríos y haciendas; tambos y posadas, hogares de amigos.
Los imaginamos bordeando la vertiente del desierto de Atacama y cruzando
reverentes una fracción del territorio Mapuche. Llegaban a Vilque –acogedor
convergente de caminos quechuas en el Sur de Perú-, otrora centro comercial de
confluencia internacional: unos del norte argentino, otros de la costa del
Pacífico.
Danza "LOS TUCUMANOS" inspirada en los arrrieros en Vilque |
Los imaginamos
transportando bloques de piedra granítica desde las canteras de Vilque a la
ciudad capital, para la construcción de un arco, homenaje a la Gesta Libertaria
de Perú y América.
Por eso, visitante
amigo, hermano, cuando retornes a Puno para embriagarte con su belleza
selenita, recuerda también que en su plaza de armas, a medio día, te espera una
salteña con puntitos de limón. Exquisita empanada y oportuna artesanía de hogar
pensando en la familia que retorna: testimonio de caminos recorridos desde
Salta en el norte argentino. La salteña se quedó con nosotros –como el canto
dolido de los arrieros- para “entibiar los inviernos” y sabiendo que a los
puneños nos encanta su presencia, todo el año a medio día.
_____________
COMENTARIOS PUBLICADOS en http://jesussantisteban.blogspot.com/
Oswaldo Valderrama
Cuentas. Los arrieros en mulas traían a Puno vino y pisco
en odres, que había que embotellar para el consumo familiar o comercial. Se
alojaban en la calle Tacna en un inmueble de la familia Leonardo Zevillanos.
Unos de apellido Zevallos y otros Palomino. También traían pan de harina de
maíz, aceitunas y pasas, que para nosotros, niños, eran delicia al paladar.
Ruth Gloria Zevallos
Ramos. Las penas y las vaquitas se van por la misma
senda, la canción del arriero...para llegar a su destino..y que destino..cuenta
mi abuela que llevaban chicharrón de chancho...en la alforja y les duraba 8
días así a la intemperie; no sabían nada de nada en cuanto a electrodomésticos
y un gran señor de las pampas de Paucarcolla cogía su sombrero y lo ponía sobre
el fuego...a tostar maíz...que tal magia los de estos arrieros, gracias muchas
gracias por ilustrarnos con tan bellos recuerdos, Dios lo bendiga.
Sandra Pineda Arce. Las salteñas en Salta te las
sirven recién horneadas en hornos de barro, son deliciosas..buena copia las de
Puno. Acabo de pasar por el norte argentino siguiendo la ruta de las salteñas,
las más ricas las comimos en Tucumán, la tierra de Mercedes Sosa. Hay tanta
historia en común con toda latinoamérica debido a las gestas libertarias..y
actualmente al turismo y gastronomía. Compartiendo experiencias aprendemos
mucho. Como siempre gracias a don Jesús Santisteban que con sus aportes
enriquece nuestro conocimiento y despierta la curiosidad...un abrazo!
(Notas: 1, fragmentos de poesía con derechos
reservados)
________________________________________
No hay comentarios:
Publicar un comentario